El año pasado en el estado 300 hectáreas se dedicaron a la siembra de berries, este año se registran entre 500 y 600 hectáreas
Guadalajara, Jal. (México).─ La reconversión del campo jalisciense no sólo se vive en la adaptación a la nueva tecnología, también en el cambio de los cultivos. La agricultura protegida se ha convertido en la opción más atractiva para los productores, principalmente, la siembra de berries.
Los berries captaron la atención comercial mundial al reportar el crecimiento más dinámico en la década de 1997-2007. Su aceptación y sobre todo las utilidades que generan llevaron a que los productores jaliscienses se dedicaran a ello, incluso dejaron de sembrar lo que tradicionalmente sembraban.
Y es que una cajita de berries de 2.4 kilos se vende hasta en 18 dólares, es decir, la rentabilidad por hectárea es alta, se obtienen de 200 mil a 300 mil pesos por hectárea, aunque depende de los precios internacionales.
Un ejemplo de ello se observa en el municipio de Jocotepec en donde existen productores de berries asociados a las empresas Berrymex y Driscoll´s. La delegación estatal de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) visitó la semana pasadas esos campos para conocer sus prácticas, su proceso de acopio de tratamiento y empaque, para exportación principalmente.
“Hay que recordar que no es mucha la inversión para establecer una hectárea de berries, se necesitan macrotúneles, la inversión en promedio es de 500 mil pesos.
“Entonces, en un ciclo sacan cerca de 2.4 o hasta tres kilos por metros cuadrado, de eso sacan de diez mil a 11 mil cajitas de frambuesas, por ejemplo, en una hectárea y eso les genera entre 200 mil y 300 mil pesos”, explicó el delegado de la Sagarpa en Jalisco, Juan Antonio González.
El año pasado en el estado 300 hectáreas se dedicaron a la siembra de berries, este año se registran entre 500 y 600 hectáreas. “Sí ha habido reconversión de tierras de los productores porque Jalisco es de los que ha tenido más crecimiento en agricultura protegida y se han reconvertido a ésta. Han estado emigrando, por ejemplo de agave, por el precio de la planta; otras eran tierras ociosas y no estaban siendo productivas y otras tierras de pastoreo, es decir que tenían pasto”, por ello es que aunque algunas tierras han cambiado de cultivos no hay desabasto en los productos que tradicionalmente se siembran en la región como granos, trigo, maíz, caña, avena y cártamo.
Fuente: informador.com.mx
