Estas tierras que se muestran en la foto eran de temporal hace un año; hoy son de riego gracias a los apoyos recibidos
Durango, México.— Fernando Pulgarín es un productor de Poanas que hace un año por fin se decidió a solicitar apoyo de equipamiento a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) para mejorar su producción; hoy sus tierras producen y valen al menos el doble.
Tiene 70 hectáreas de siembra y de ellas solo sembraba con riego 30; el resto las dejaba como temporal porque el pozo no le daba agua para la totalidad.
“La verdad es que siempre me decían que me registrara para pedir este apoyo, pero siempre creí que eso era perdedera de tiempo, que me habrían de pedir un ‘moche’ para darme el equipo o que me apuntaba y el beneficio se lo daban a otro”, comentó el productor. Pero en 2015 decidió registrarse, al fin —señaló— que no perdía nada y si le pedían “moches” no daría ningún peso.
Presentó un proyecto de riego con el cual buscaba hacer llegar el agua a la mayoría de sus tierras y para el mes de junio de 2015 le hablaron para decirle que ya estaba aprobado.
“La verdad, pensé que había llegado el momento en que me pedirían que les diera un dinero para darme el apoyo solicitado y si era así, no firmaría nada aunque no me dieran nada”, añadió.
Para su sorpresa le dijeron que el proyecto de instalación de red hidráulica para riego de mil 400 metros lineales estaba autorizado; la Sagarpa apoyaba con una parte y él tenía que poner otro porcentaje más pequeño de la obra.
Como no dio ningún “moche” aceptó y cuando el constructor fue a iniciar los trabajos preguntó qué necesitaba para ampliar la red hasta los dos mil metros lineales, es decir, los otros 500 que le faltaban.
El proyecto incluía cuatro hidrantes, pero cuando vio que no le costaban mucho, instaló 12 en todas las 70 hectáreas.
“Antes, para que el agua llegara hasta las últimas hectáreas se tardaba siete horas y en ese lapso de tiempo ya se había perdido una gran cantidad ya sea que se hubiera filtrado o evaporado, hoy bastó abrir el pozo y sale agua a dos kilómetros de distancia”, indicó.
Fernando Pulgarín asegura que gracias a que se decidió a pedir el apoyo hoy en su rancho gasta menos energía, menos mano de obra, crece su cosecha porque ahora las 70 hectáreas son de riego y pueden darse dos cosechas al año, además de que aumenta la plusvalía de sus tierras y ya no desperdicia agua.
Por ello, el productor invitó al resto de los campesinos que como él han estado escépticos de pedir este tipo de apoyos porque creen que se trata de “robadero” de dinero y corrupción, “las cosas son diferentes y todo depende de que nosotros dejemos atrás esa apatía en la que hemos vivido siempre”, concluyó.
Fuente: El Siglo de Durango, imagen
