Las frutas deshidratadas se obtienen al someter a diversas frutas especiales a un proceso de secado o de deshidratación
Ciudad de México.─ La Central de Abasto de la Ciudad de México invita a disfrutar de las frutas secas que se comercializan al menudeo en la Nave I-J y al mayoreo en el Sector Abarrotes y Víveres, donde podrán encontrarse en sus presentaciones de una sola fruta o mixtas y pueden ser un excelente regalo en esta temporada.
Las frutas deshidratadas se obtienen al someter a diversas frutas especiales como arándanos, peras, manzanas, kiwis, duraznos, chabacanos, uvas, ciruelas, plátanos, piñas, mangos, cerezas, fresas, higos, dátiles y cocos, a un proceso de secado o de deshidratación.
Los métodos más comunes son:
Natural al sol. Las frutas se dejan secar al aire libre, por lo que este proceso sólo se puede realizar en las regiones muy favorecidas por el clima.
Por calor artificial. Tanto el horno como el microondas garantizan buenos resultados, porque permiten regular la evaporación de manera progresiva. Se comienza a una temperatura baja, de 45 a 50 grados, que se eleva progresivamente hasta 65 o 70 grados, según la fruta tratada.
Con el secado artificial la operación se termina en ocho o diez horas; en el microondas, según la fruta, de 30 minutos a una hora, mientras que al aire libre hay que contar con ocho días o más.
Las frutas secas son consideradas como un aperitivo, pero incluso en algunas cocinas del mundo las suelen emplear como ingredientes esenciales en la elaboración de algunos platillos.
El proceso de secado de estas frutas destruye una parte de la vitamina C que contienen, por lo que tienen un menor contenido de esta vitamina que las frutas frescas. Además, algunas de éstas se secan con ciertas trazas de dióxido de azufre para darle algún color llamativo, es el caso de los melocotones y albaricoques, los famosos orejones, que suelen tener un color naranja llamativo debido a estos aditivos.
Las frutas secas contienen la misma cantidad de vitamina A que las frescas y un 10 por ciento más de azúcares y fibras, aunque son diferentes en su consistencia por estar deshidratadas.
Las uvas pasas y los dátiles contienen una mayor cantidad de calorías. Los más ricos en potasio y en sodio son los orejones de albaricoque. El plátano es el más rico en magnesio, y el higo es el más rico en calcio, por lo que deben tomarlo en cuenta las personas con diabetes y sobrepeso, ya que no es recomendable el consumo en ambos casos.
Estas frutas combinan muy bien con los cereales del desayuno y los enriquecen en vitaminas, minerales y fibra, lo cual resulta una buena alternativa para los niños. Incorporarlas en la dieta puede ayudar a aliviar problemas como la anemia, el estreñimiento y desórdenes en la piel. Por su riqueza en glúcidos las consumen los deportistas durante o después del esfuerzo físico.
Fuente: Agencias
