Con el fin de que los campesinos mexicanos utilicen maíz ciento por ciento natural y puedan competir con granos híbridos de empresas transnacionales.
MÉXICO. — Con el fin de que los campesinos mexicanos utilicen maíz ciento por ciento natural y puedan competir con granos híbridos de empresas transnacionales, el Centro de Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), desarrolla variedades de la gramínea de alto rendimiento, que en algunas zonas del país han tenido hasta 12 toneladas por hectárea.
El proyecto, que ya se encuentra en fase experimental en Oaxaca, consiste en un pool de maíz (combinaciones de varias razas para potenciar el rendimiento) mexicano seleccionado en varios territorios del país, el cual se ofrece a los agricultores para que no abandonen las especies nativas y al mismo tiempo tengan ganancias económicas.
Víctor Chávez, director de movilización de recursos del CIMMYT, comentó que en algunas zonas del país los agricultores abandonan las especies nativas y optan por sembrar variedades híbridas (cruzas) de empresas privadas, lo cual pone en riesgo la diversidad de maíces mexicanos, pues se dejan de cultivar.
Con el proyecto actual, según el investigador, se obtienen en los valles altos del país de cuatro a cinco toneladas por hectárea; en los trópicos de siete a nueve y en los subtrópicos de 12 a 13 toneladas por hectárea.
El gran riesgo que observamos, añadió, es que el maíz tradicional se está dejando de sembrar porque las nuevas generaciones abandonan el campo para buscar otro tipo de empleos. Con lo cual la riqueza de cada variedad no se transmite entre las generaciones y llega a perderse.
De pasar la fase experimental de este desarrollo, se buscaría llevarlo a otras zonas del país para que los campesinos tengan opciones de siembra ante el maíz de marca, pues no se puede llevar algo que sea para cambiar la cultura del agricultor, es muy difícil y se estaría cayendo en el error de las transnacionales.
Después de Oaxaca, los pools de maíz se llevarán a zonas como la huasteca potosina, veracruzana e hidalguense, y la Secretaría de Agricultura será la responsable de repartir entre los productores el grano, pues los desarrollos del CIMMYT son únicamente de investigación.
Fuente: Milenio Diario
