La propuesta de reforma fiscal del Ejecutivo, en especial la aplicación de la contribución empresarial a tasa única (CETU), podría provocar la desaparición de tres millones de productores del campo y dos millones 400 mil micro, pequeñas y medianas empresas, advirtieron el Consejo Nacional Agropecuario (CNA) y la Asociación Latinoamericana de Micros, Pequeñas y Medianas Empresas (Alampyme).
El presidente del CNA, Jaime Yesaki Cavazos, alertó a la Secretaría de Hacienda que alrededor de tres millones 500 mil unidades de pequeños productores del campo podrían resultar afectadas y hasta desaparecer si la CETU se mantiene en niveles de 16 por ciento, porque —explicó— ese sector no cuenta con recursos económicos ni técnicos suficientes para cumplir con el fisco en los términos propuestos.
Manifestó que independientemente del comportamiento de los precios de los productos del campo, la mayor crisis se reflejaría en el alto número de pequeños productores que desaparecerían y los que quedarían fuera de la competencia, como el sector de las hortalizas, que hoy tiene participación en el mercado internacional.
Yesaki señaló que el gobierno mexicano y la iniciativa privada tienen que “entender y atender” el tema de la pobreza de manera conjunta y responsable, por lo que no se debe permitir que la propuesta fiscal afecte a campesinos, productores y, a la larga, alcance a los consumidores.
Por separado, el presidente de la Alampyme, Pedro Salcedo, señaló que más de 2.4 millones de negocios de ese segmento irán a la ruina y tendrán que cerrar si se aprueba al proyecto de reforma hacendaria enviado por el Ejecutivo federal al Congreso.
Dijo que el Poder Legislativo debe enfocarse en una reforma fiscal integral que obligue a los grandes empresarios a pagar puntualmente sus tributos, porque actualmente evaden al fisco por un monto mayor a 300 mil millones de pesos. Consideró que la iniciativa presidencial, en sus actuales términos, debe ser desechada.
Agregó que por lo menos 1.2 millones de empresas de ese sector ya enfrentan problemas por la presión que representan los pagos al Seguro Social, al Infonavit y al Servicio de Administración Tributaria.
Por ello, si la propuesta de reforma hacendaria es aprobada en los términos en que fue presentada, se convertirá en la “puntilla” para las pequeñas y medianas empresas, lo que provocará un mayor desempleo, que afecta ya a millones de mexicanos.
En conferencia de prensa dijo que se avizora un negro panorama económico y social, porque una carga fiscal todavía mayor a la que ya establece la Ley del Impuesto sobre la Renta inhibirá la contratación de servicios, la generación de nuevos empleos y propiciará una mayor dependencia del exterior.
Explicó que la imposibilidad de deducir los importes de los salarios propiciará que paguen más quienes utilicen más mano de obra intensiva. Por lo general la nómina absorbe 50 por ciento o más de los ingresos de las pequeñas y medianas empresas, y si además se tuviera que pagar una tasa de 16 por ciento de la CETU resultaría gravísimo para las unidades productivas del país, concluyó.
Fuente: La Jornada
