El desarrollo y aprovechamiento de cultivos del desierto mexicano, como la candelilla, la gobernadora o la yuca, así como de algas marinas han hecho posible la obtención de productos orgánicos que permiten a los agricultores incrementar su producción, regenerar sus suelos, ahorrar insumos por uso de pesticidas y alcanzar una mejor calidad en la cosecha, con lo cual se logra un sobreprecio que se refleja en mayores ingresos para el agricultor. A sí lo expresa el director general de Biotecnología Agrícola de México (Bio Agro Mex), ingeniero Enrique Guillermo Medina Valdés, empresa que desde 1997 se dedica a la investigación, desarrollo y elaboración de agroinsumos orgánicos, órgano-minerales y enzimáticos naturales.En la actualidad, la empresa opera con dos plantas, ubicadas en Saltillo, Coahuila, una de ingrediente activo y otra en la que elaboran producto terminal. El 95 por ciento de sus clientes produce para la exportación, ya que el manejo orgánico brinda valor agregado a sus productos, que libres de agroquímicos son muy cotizados en Europa y Estados Unidos, donde son certificados por la Food and Drug Administration (FDA) y Environmental Protection Agency (EPA) de EU.Bio Agro Mex no utiliza productos químicos ni siquiera en sus métodos de extracción. Las investigaciones y los productos desarrollados le permitieron ganar en 1999 un concurso a la innovación tecnológica en Francia, como la empresa más pequeña con el mayor número de productos de origen orgánico.En territorio nacional, tiene mayor presencia Baja California, Baja California Sur, Sinaloa y Sonora, donde se cultivan productos de exportación, pero además se extiende hacia Campeche, Yucatán, Veracruz, Tamaulipas, Michoacán, Nayarit, Colima, Querétaro, Estado de México, Coahuila, Nuevo León, Aguascalientes y Zacatecas.La firma -subraya el ingeniero Enrique Medina ha desarrollado procesos para la elaboración de agroinsumos cuyos ingredientes activos de origen vegetal mantienen un espectro de acción mucho más amplio que los de origen químico, y a la vez que proporcionan incrementos notables en la producción y calidad en los cultivos, rehabilitan sus recursos como es suelo y microflora benéfica. No obstante su enfoque hacia la agricultura orgánica, sus productos también pueden emplearse en la agricultura convencional.Un aspecto fundamental es que los patógenos no desarrollan resistencia a estos ingredientes activos vegetales, ya sea en el suelo o en las plantas, como es el caso de los químicos y, lo más importante, no conllevan peligrosos efectos sobre especies que no son objetivo, tales como invertebrados, peces, aves y mamíferos, incluyendo el hombre.Una ventaja fundamental para los agricultores es que los productos de Bio Agro Mex son más baratos con respecto de los convencionales, que además deterioran el suelo y cada vez requieren incrementar más las dosis de aplicación.Un aspecto positivo para el consumidor es que los productos cosechados no presentan residuos nocivos, esto facilita al agricultor la comercialización y exportación de sus cosechas, con lo cual logra incrementar sus ingresos.
Bioagromex ha logrado desarrollar un paquete de agroinsumos con tecnología propia, el cual incluye: fertilizantes líquidos enzimatizados, potencializadores enzimáticos, mejoradores, desalinizadores y desinfectantes orgánicos de suelo, fungicidas bactericidas y nematicidas de origen vegetal, insecticidas a base de aceites grasos. Así como complejos nutricionales con aminoácidos y protectores para cultivos contra altas y bajas temperaturas, y retardadores de maduración poscosecha, entre otros. Todos de origen vegetal, marino, animal y mineral.La compañía también tiene la inquietud constante de brindar al agricultor un paquete de servicios y productos más completos, respecto a los ya conocidos. Por ello, mantiene en proceso de investigación y desarrollo, con parcelas comerciales y semicomerciales en el campo, en diferentes zonas del país, productos con alta tecnología como son acidificantes surfactantes, sales de potasio de ácidos grasos, desalinizadores a base de microorganismos y conservadores de humedad.
Productos Bio Agro Mex
Bio Agro Mex, con el propósito de otorgar un beneficio adicional al agricultor, ha diseñado un paquete de productos orgánicos.
Proenzim® es un complejo de fitohormonas naturales de algas marinas y activadores metabólicos. Las algas son cosechadas por la propia empresa en el Golfo de México y procesadas en sus instalaciones, donde son enriquecidas con saponinas -extraídas de la yuca, una planta del desierto- y con hojacen. Este proceso aumenta la cantidad de encimas y aminoácidos, los cuales se adhieren al extracto. Este producto es un potencializador orgánico enzimático que hace que la planta manifieste con mayor fuerza su potencial genético. De esta manera estimula el crecimiento radicular y el vigor vegetal, aumenta la cantidad de proteínas en el producto final, ya sean granos, frutas o legumbres. Al mismo tiempo permite la regeneración de la tierra, que generalmente está sumamente contaminada por el uso excesivo de químicos y permite ahorro de fertilizantes. En Baja California y Baja California Sur, por ejemplo, donde el uso de agroquímicos ha sido constante, se ha probado la efectividad de esta reacción y se ha logrado la regeneración de la tierra hasta en 90 por ciento en tres años.
Bio fyb® es un fungicida y bactericida obtenido a base de extractos de origen vegetal, de amplio espectro. Los ingredientes activos se extraen de plantas del desierto como la gobernadora, yuca, cola de rata y hojacen. Una de las grandes ventajas de este producto es que no deja absolutamente ningún residuo, por lo que no hay periodo entre aplicación y cosecha, es decir, se puede aplicar hoy y mañana realizar la cosecha sin ningún riesgo. Hace unos meses, productores de exportación expresaron que Estados Unidos había prohibido el uso de bromuro de metilo para desinfectar los suelos, por lo que solicitaron a Bio Agro Mex desarrollar un producto que sustituyera esta sustancia. El resultado fue PROSUELO, desinfectante de suelo que ataca hongos bacterias, virus y nematodos. Igualmente es un extracto a base de plantas del desierto y compuestos minerales, que no deja residuos, además de integrar materia orgánica al suelo.Para mantener la regeneración de la tierra la firma elaboró también
Optisuelo®, un acondicionador de suelos a base de extractos de ácidos húmicos fúlvicos.
Bio neem® es el único insecticida de origen orgánico a base de aceite graso que la FDA acepta. La empresa lo desarrolló a partir de una semilla de la India, que contrasta con los productos elaborados con aluminio y potasio. Su efectividad ha sido probada contra la mosquita blanca, donde ha tenido éxito. Sin embargo, tiene un amplio rango de aplicaciones, al combatir también pulgones, larvas y picudos en general.
Bio Jamm® es un fertilizante líquido 100 por ciento (9-4-9) orgánico derivado de la sacarosa y pectina. Sobresale el hecho de que contiene 18 de los 22 aminoácidos que intervienen en la nutrición vegetal.
Bio Hcaz® fue el primer producto que desarrolló la empresa; es un acaricida y fungicida de contacto a base de hidróxido de calcio y azufres.La firma ofrece fertilizantes biomix líquidos en complejo organo-mineral enriquecido con enzimas y aminoácidos N, P, K Mg, Fe, B, Ca, Bio C
Wax®, Bio Cold Prot® y Bio Sun Prot® son compuestos xerófilos de origen vegetal para protección de plantas y frutas contra altas y bajas temperaturas así como retardador de maduración. Con la aplicación de esta cera, una fruta como la manzana, por ejemplo, puede permanecer sin refrigeración durante 60 días con una pérdida de humedad de sólo 5 por ciento.
