La capacidad ligninolítica de los hongos permite degradar colorantes, por lo que podrían ser utilizados para tratar los efluentes de la industria textil
HIDALGO, MÉXICO.— Investigadores de la Universidad Politécnica de Pachuca analizan varios tipos de hongos endémicos de la huasteca hidalguense que podrían ser utilizados en la industria textil como decolorantes y en el pretratamiento para la producción de etanol.
La investigación, a cargo de la doctora Ainhoa Arana Cuenca, comenzó con la recolección de diversas especies de hongos que crecen en árboles de esta región y que posteriormente fueron sembrados en placas. Así se pudieron identificar 70 variantes y analizar su crecimiento a diferentes temperaturas, de entre 30 y 42 grados.
Los hongos estudiados, explicó la doctora Arana Cuenca, son del género Trametes, que crecen en el campo a una temperatura entre los 20 y 28 grados. Sin embargo, los recolectados para la investigación crecieron en el laboratorio a una temperatura de 37 a 42.
“Esta característica es importante en su aplicación industrial, ya que el aumento de la temperatura favorece las reacciones químicas en el vegetal”, dijo la experta.
Asimismo, a los hongos de la huasteca hidalguense se les diagnosticó capacidad ligninolítica, es decir, producen enzimas que rompen la lignina, y en consecuencia son capaces de fragmentar otro tipo de moléculas, como los que tienen los colorantes.
“Una vez analizada la capacidad ligninolítica de los hongos, elegimos los que tienen mejores características y estudiamos su capacidad de degradar colorantes azul, negro, verde y rosa; por lo que podrían tener uso en la industria textil para el tratamiento de su efluentes (desechos líquidos)”, comentó la investigadora.
Los resultados de esta investigación cobran mayor relevancia en estados como Hidalgo, cuya industria textil podría verse favorecida a futuro al ayudar en el tratamiento de ríos, lagos y mantos acuíferos contaminados.
Respecto de la utilización de los hongos para producir etanol, los investigadores explicaron que dado que este oxigenante se obtiene mediante la fermentación de azúcares de diferentes vegetales, realizaron un pretratamiento con los hongos ligninolíticos, de manera que eliminen la lignina de diversos vegetales, así la celulosa y la hemicelulosa quedan disponibles para la obtención de los azúcares fermentados.
Para este fin, en el laboratorio de la Universidad Politécnica han realizado pruebas con bagazo de caña, pajas de cebada y maíz, residuos que dieron resultados prometedores.
2000 Agro (Con información de la Agencia ID)
