Organismos vegetales modificados cibernéticamente podrían ser pronto una realidad
Un ciborg es un organismo el cual contiene materiales sintéticos conviviendo con los tejidos vivos. El término es empleado con frecuencia en la ciencia ficción, sin embargo, comienza a tener relación con la agricultura. Suele ser una palabra asociada a humanos modificados pero las plantas no se están quedando atrás. Prueba de ello son las investigaciones de Magnus Berggren, quien desde 2012 ha estado trabajando en la combinación de plantas y electrónica: plantas ciborgs.
Berggren es investigador de la Universidad de Linköping, en Suecia. El objetivo de su trabajo es introducir una especie de cableado en organismos vegetales a través del cual conducir electricidad. Con esto se pretende aprovechar el sistema vascular de las plantas para formar un hilo muy delgado de un polímero sintético. Esta especie de cableado lleva por nombre PEDOT-S:H, el polímero en cuestión.
Para realizar sus investigaciones Berggren y su equipo han trabajado con rosas desde el año 2012. Sus primeros resultados fueron publicados en la revista científica Science Advances. Hasta ahora han conseguido desarrollar cables de hasta 10 centímetros de largo a través del xilema. Esto se ha logrado sin bloquear la circulación de agua y nutrientes.
Al mismo tiempo que el cableado debe conducir electricidad no tiene que dañar las estructuras internas de la planta. Actualmente el equipo ha obtenido el polímero que puede cumplir con ambos requisitos. No fue sencillo pues se probaron más de una docena de materiales. Varios bloquearon el xilema y dañaron al organismo vivo.
Las plantas se alimentan de nutrientes minerales. Los minerales que requieren las plantas son absorbidos en forma de iones, cationes o aniones. Es por ello que la conductividad eléctrica es fundamental para que sean absorbidos y distribuidos en la planta.
Por lo tanto, con la implementación de un sistema de cableado dentro de la planta sería posible regular muchas de las funciones de crecimiento y desarrollo. Por esta razón el trabajo con plantas ciborgs tendría implicaciones útiles en el manejo de los cultivos. Sin embargo, se trata de un área nueva de la ciencia, por lo cual su uso práctico podría darse hasta dentro de varios años.
