Llaman a mejorar la producción cárnica bovina en Argentina
La falta de eficiencia y la necesidad de mejorar los rindes por hectárea en kilos de carne al lograr animales más pesados, fue el eje central de una presentación que hizo Jorge Torelli, gerente general del Frigorífico Matievich en el cuarto Congreso de Ganadería que se realizó la semana pasada en la ciudad de Rosario, al hablar sobre las perspectivas de la cadena de Ganados y Carnes.
Torelli destacó que hay que trabajar con la mira puesta en la ganadería de precisión, como paso fundamental para ganar productividad en toda la cadena, apuntando a la medición de la productividad en kilogramos por hectárea.
“Hay establecimientos que producen 200 kilogramos por año mientras que otros campos de cría sobre pastura de alfalfa tienen un rendimiento de 500 kilogramos y llegando en áreas de engorde a 650 kilogramos, lo cual es comparable en rendimiento con una soya de 51 quintales por hectárea y sin riesgo climático”, destacó la incorporación de planes sanitarios y reproductivos.
Según el veterinario, “la ganadería se transformó en un negocio financiero, donde se entra en unos meses, se engorda y se sale rápido, sacando animales debajo el peso mínimo”, aseguró.
El faenado de animales livianos también está fomentado por el tipo de consumo tierno al que estamos acostumbrados. Pero de acuerdo con el especialista, “si a una res un poco más pesada se la ayuda con procesos industriales que están faltando como la permanencia de 48 horas en cámaras de maduración, y el enfriamiento para que se transforme músculo en carne, se produce una tiernizacion del mismo”.
En cuanto a las perspectivas para el crecimiento del sector a escala internacional, la demanda de carne se dará debido al crecimiento poblacional: “El crecimiento demográfico supera la oferta de cualquier alimento, y justamente la carne es lo que más tiempo lleva producir, o sea que va a ser de lo más buscado”, agregó Torelli.
Para Torelli, la competitividad es otro de los problemas que afectan al mercado ganadero. “Respecto al cambio de nuestra moneda tenemos altos costos internos, fuerte carga impositiva, mientras no cambien eso, y si no se resuelve el problema de ser más competitivos y poder acercarse a los valores que tienen Uruguay y Brasil, vamos a tener un gran problema con los precios”, concluyó el asesor.
