Ciencia y tecnología, nuevos instrumentos, acuerdos de vedas y observadores, colocan a pesca mexicana como una de las más responsables del mundo
Cada día, el sector pesquero mexicano escribe una historia de éxito porque ha decidido asumir el reto de transformar sus ideas, innovar con sus productos y procesarlos para darles un valor agregado con lo que impulsa su comercialización y competitividad.
Lo anterior, también forma parte del sector pesquero y tanto el emprendimiento como la innovación abren grandes oportunidades a nuestros productos, además de que fortalecen el desarrollo económico personal, familiar y regional.
Por otra parte tenemos que el 25 por ciento del volumen que se captura en México se ha certificado bajo un proceso riguroso de sustentabilidad, cuando a escala mundial el promedio es de 12 por ciento.
Una de las herramientas de manejo para alcanzar esta sustentabilidad son los refugios pesqueros, áreas perfectamente delimitadas, restringidas a la pesca que promueven la protección del ambiente, y con el paso del tiempo se convierten en semilleros que abastecen las zonas circundantes de larvas juveniles y peces adultos.
Actualmente, se han establecido en los mares mexicanos 32 refugios pesqueros para recuperar poblaciones de peces, moluscos y crustáceos con valor comercial.
Y en el campo de las exportaciones, de entre los diez productos agroalimentarios que representan el 86 por ciento del valor comercial total, se encuentran los moluscos vivos (16.9 millones de dólares), langostas (15.4 millones de dólares), así como camarones y langostinos congelados (6.2 millones de dólares).
En el contexto internacional, México se ubica en el tercer lugar como productor de pulpo; cuarto en atún; séptimo en camarón, y séptimo en sardina; y a escala nacional las principales especies por volumen fueron: sardina, camarón, mojarra, túnidos y anchoveta.
Dentro del sector pesquero resalta el trabajo de 172 mil personas, 7.4 por ciento mayor en relación con el mismo trimestre de 2016, por lo que aportó el 2.4 por ciento del empleo en el sector; esto sin contar los empleos generados en acuacultura y que en total suman alrededor de 300 mil.
