El Barzón denunció el adeudo que Aserca mantiene desde 2014 con productores de maíz, frijol, sorgo, trigo
México.— El Barzón denunció el adeudo que la Agencia de Servicios a la Comercialización y Desarrollo de Mercados Agropecuarios (Aserca) mantiene desde 2014 con productores de maíz, frijol, sorgo, trigo y exigió el pago. También exhibió la quiebra financiera de esta institución debido al fracaso de su esquema.
“Se confirma la quiebra financiera de Aserca pues terminará 2015 con un pasivo de 11 mil 500 millones de pesos de los ciclos otoño-invierno y primavera-verano, y de adeudos correspondientes desde 2014. De esta forma decenas de miles de productores de maíz, frijol, sorgo y trigo y de maíz también de los estados de Chihuahua, Zacatecas, Durango, Tamaulipas, El Bajío y La laguna quedan en la incertidumbre, no sólo en el pago de sus cosechas sino también en las garantías para los próximos ciclos agrícolas.”
La organización acusó que “los elevados costos de producción, el abuso de los acopiadores, la arbitrariedad con la que actúan los industriales de la harina de maíz, trigo y los engordadores de ganado, resultan inaceptables para garantizar la rentabilidad de miles de agricultores mexicanos; el gobierno mexicano está obligado a cambiar el funcionamiento de una institución que representa el canal institucional para inyectar sumas millonarias de recursos a grandes empresas agroalimentarias y a tolerar esquemas de apoyo basados en la corrupción”.
Para un real beneficio a los productores de grano, El Barzón exigió un nuevo programa que garantice, bajo la figura de almacenes generales de depósito, la presencia de nuevos competidores de carácter público y privado o de composición mixta, en las fases del acopio y la comercialización.
Además, propone construir nuevos instrumentos para el ordenamiento de mercados, la regulación de la oferta, detonar el crédito a la comercialización, construyendo nuevos estándares y normas de calidades, pesos y medidas con reconocimiento en el mercado nacional e internacional; promover la organización de los productores y consolidar una relación comercial entre el productor y los comercializadores basada en la equidad y las ventajas mutuas.
Además, pide que los nuevos instrumentos institucionales, tanto de carácter económico como financiero, tengan como propósito reducir los márgenes de intermediación entre el productor y el consumidor, garantizar el precio justo de las cosechas y reducir el impacto de la volatilidad en los precios a los consumidores.
2000 Agro, imagen
