Realizan detección y control de la plaga en 10 estados del país para evitar daños a la producción agrícola
La langosta centroamericana (Schistocerca piceifrons Walker) es una plaga con mayor presencia en el sureste de la República Mexicana, que puede afectar hasta 100 por ciento de la producción de maíz, frijol, sorgo, arroz, soya, cacahuate, caña de azúcar, chile, tomate, cítricos, plátano, coco y pastizales, entre otros.
Este insecto provoca daños a más de 400 especies vegetales porque se alimenta de los cultivos frutales, pastos y especies silvestres y los defolia, es decir, provoca la caída prematura de todas las hojas cuando las infestaciones son muy severas.
En etapa de ninfa, la langosta se agrupa en bandos; cuando su estado biológico es de adulto volador, se congrega en mangas que ocasionan el quiebre de ramas al posarse sobre ellas.
Actualmente, la langosta centroamericana se encuentra bajo control en 64 municipios de los estados de Campeche, Chiapas, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán, mediante la Campaña contra la Langosta que opera el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), la cual incluye acciones de exploración, muestreo, control biológico, control químico, capacitación a técnicos y productores y supervisión.
Cabe recordar que la campaña se implementa en las regiones en donde tradicionalmente se reproduce y crece la langosta, así como en las zonas de invasión, donde opera todo el año, como medida preventiva, existan o no reportes de su presencia.
Su combate se lleva a cabo mediante control biológico y químico cuando el insecto se encuentra en estado biológico de ninfa, a fin de mantener una baja densidad del insecto y evitar daños a la producción agrícola del país.
