Es muy arriesgado dar por hecho que el uso de plaguicidas en los campos agrícolas ha provocado el problema de “desaparición” de las abejas, consideró el INIFAP
Matamoros, Coahuila.— Es muy arriesgado dar por hecho que el uso de plaguicidas en los campos agrícolas ha provocado el problema de “desaparición” de las abejas, puesto que todavía no se ha hecho ningún estudio para corroborar tal situación, expresaron investigadores del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP).
Mencionaron que el fenómeno no es privativo de la región, pues existen antecedentes que en otros países como Brasil y España también hay una problemática similar.
“No está corroborado que la utilización de los químicos esté provocando la muerte de las abejas. Es muy arriesgado asegurar eso”, dijo Manuel Ramírez Delgado, investigador del Programa de Entomología del INIFAP.
Mencionó que pueden ser varios factores los que pueden provocar la muerte del insecto, el cambio climático, la contaminación y desde luego el uso de los agentes químicos en la producción agrícola, pero insistieron en que las causas deben comprobarse científicamente.
Dijo que hasta ahora no hay ninguna solicitud en el centro para hacer una investigación al respecto, pues es una atribución de los productores apícolas o agrícolas al ser los afectados, pues el proceso de las cosechas depende de la polinización de las abejas.
“Ellos tendrían que solicitar a Sagarpa que se haga el estudio para que ellos lo canalicen al INIFAP, pues se necesita la asignación de recursos”, dijo Ramírez Delgado.
“El problema no está cuantificado a nivel regional. No sabemos cuál es la población (de abejas) que hay, las zonas afectadas, porque volvemos a lo mismo; no hay un estudio para corroborarlo y no es una situación privativa de la región, yo acabo de estar en un posgrado en Brasil y hay especialistas en abejas que presentan el problema de mortandad como muy grave y son otras condiciones, otros cultivos. Es una problemática a nivel mundial, porque está pasando en otros países”, dijo Francisco Javier Pastor López, director de planeación del INIFAP.
Los investigadores insistieron en que los agricultores y apicultores deben demandar ante la instancia correspondiente que asigne los recursos para atender la problemática, pues de no hacerlo las afectaciones a la cadena productiva serán mayúsculas.
“Nosotros no hemos trabajado con abejas, sería un campo nuevo para nosotros, pero nos pondríamos de acuerdo con otras instituciones como la Narro (Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro), porque ellos sí tienen especialistas, incluso sabemos que ya están trabajando en una línea de investigación”, dijo el encargado de Entomología del INIFAP.
Fuente: El Siglo de Torreón, imagen
