México tiene condiciones climáticas, recursos naturales y capital humano para impulsar la productividad de manera sustentable y el uso de tecnologías es fundamental para lograrlo
La ciencia y la tecnología son elementos clave para el desarrollo del campo, pues gracias a esta combinación es posible producir alimentos sanos, inocuos y deliciosos, sin poner en riesgo al medio ambiente.
Así se compartió en la primera Reunión de Consejeros Agrícolas y Comerciales de las Embajadas acreditadas en México, en la que participaron representantes de 34 países y de la Unión Europea, con los que México ha refrendado lazos de amistad y cooperación tecnológica y comercial.
En este sentido, intercambiar experiencias y avances en innovación con otras naciones del mundo permite beneficiar a la agricultura, a los productores y al cuidado de los recursos naturales de los respectivos países.
Durante la reunión, el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Social (Sader), Víctor Villalobos, explicó que las nuevas políticas públicas del gobierno de México están orientadas a impulsar el desarrollo productivo, incluyente y sustentable, con la finalidad de reducir la pobreza en la población rural del país.
Para lograrlo, estas políticas cuentan con el puntual acompañamiento de innovación, tecnología, asistencia técnica y recursos, que en conjunto potenciarán la productividad agrícola, ganadera y pesquera del país.
