Con sede en México, el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo conserva una colección de 28 mil razas de maíz y 140 mil de trigo para procurar la seguridad alimentaria en el mundo
José Luis Martínez
En el municipio de Texcoco, Estado de México, se encuentra la sede mundial del Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (Cimmyt), un organismo dedicado a aplicar conocimientos científicos a los cultivos de maíz y trigo para mejorar las condiciones de la gente para que sea más sana y próspera, alejada de afectaciones relacionadas con crisis alimentarias, así como crear sistemas agroalimentarios más resilientes.
Se estableció oficialmente en 1966 como organización internacional, dirigido por el doctor Norman Borlaug, un especialista estadounidense que dedicó su vida a encontrar mecanismos para hacer más eficiente el rendimiento de estos cultivos básicos. Sus investigaciones iniciaron en la década de los años cuarenta y, patrocinadas por el gobierno mexicano y la Fundación Rockefeller, lograron desarrollar variedades de trigo capaces de adaptarse mejor a las condiciones climáticas y tener mejores rendimientos.
Por sus trabajos en favor de la seguridad alimentaria mundial, el doctor Borlaug recibió el Premio Nobel de la Paz en 1970 por sus contribuciones a la Revolución Verde y participó activamente en su desempeño hasta su muerte en 2009.
Los trabajos realizados por el especialista ayudaron a México a lograr su autosuficiencia en trigo en la década de 1950 y las semillas fueron llevadas a la India y a Pakistán en la década de los sesenta, donde ayudaron a salvar a la población de una inminente hambruna, como parte de la Revolución Verde. Hoy, 50 por ciento del maíz y trigo que se siembra en el mundo se basa en variedades desarrolladas en el Cimmyt.
2000Agro tuvo la oportunidad de recorrer las diferentes áreas y platicar con algunos de sus expertos para conocer las investigaciones que desarrollan.
Al ingresar al recinto, varios contenedores muestran cómo han aumentado las demandas alimentarias en el mundo desde 1850 y lo que requerirá la humanidad para sobrevivir en 2050.
El Cimmyt distribuye anualmente más de mil 500 envíos de semilla de maíz y trigo a cerca de 800 beneficiarios en más de 100 países
El Centro cuenta con un pequeño museo, fundado en 2017, donde se muestra la importancia de estas semillas para la evolución de la humanidad
Sus investigadores analizan las propiedades de cada variedad de semilla para que, al combinarlas, puedan producir plantas más resistentes a condiciones adversas como calor, falta de agua o de nutrientes
También resguarda una copia del Premio Nobel de la Paz que recibió el fundador del Cimmyt, Norman Borlaug, en 1970 por su contribución al combate del hambre en el mundo
También se encuentra allí la Orden Mexicana del Águila Azteca, máxima condecoración que entrega el gobierno mexicano a personas extranjeras, que le fue entregada al investigador estadounidense en 1970.
Por encontrarse en México, el Centro da una gran importancia al maíz en la historia de las culturas prehispánicas de América y cómo es un alimento indispensable en la dieta de todo el mundo
Algunos instrumentos de agricultura manual que se conservan en las instalaciones del museo
Bram Govaerts, director Global de Innovación Estratégica y representante regional para las Américas del Cimmyt, impartió una plática sobre la importancia de las investigaciones que se realizan en este Centro
El otro mural destaca la importancia del maíz enriquecido con las contribuciones científicas originadas Borlaug y su importancia para las culturas de todo el continente
A cada extremo del museo hay un mural que homenajea a estos cereales. En el primero aparece un cultivo de trigo, cereal que fue mejorado en su talla y consumo calórico por las investigaciones de Norman Borlaug
En el mundo existen unas 300 razas de maíz, originarias en regiones tan distantes del continente, como Canadá y Argentina
En sus instalaciones, el Cimmyt resguarda más de 28 mil variedades de maíz y 150 mil variedades de trigo provenientes de todo el mundo
Aunque los principales cultivos básicos en el mundo se originaron en diferentes partes del planeta, por sí solos serían insuficientes para satisfacer las necesidades de una región específica, por lo que deben extenderse a otros lugares
Carolina Sansaloni, experta en Caracterización Genotípica, muestra cómo se clasifica cada una de las variedades de maíz que se conservan en el Centro de Recursos Genéticos del Cimmyt
Cada variedad de maíz es conservada a temperaturas de hasta -20°C y está categorizada por su país de origen, sus características físicas y las propiedades genéticas con las que se podrían producir nuevas variedades más resistentes, mediante códigos de barras
La producción de variedades mejoradas es libre, es decir, no se pagan derechos por cultivarlas y se entregan de manera gratuita a productores e investigadores de todo el mundo
No siempre se siguen sembrando las razas o variedades nativas en el lugar donde surgieron. El Cimmyt se encarga de devolver estas semillas a sus lugares de origen
Una vez que se tienen clasificadas las características genéticas de cada variedad, se diseñan semillas híbridas. Este trabajo llega a tardar hasta ocho años
De las 300 razas de maíz que existen en el mundo, 54 están disponibles en México
Entre más lejanas genéticamente sean las razas de maíz tienen mejor rendimiento
Las semillas mejoradas que produce el Cimmyt son reproducidas por desarrolladores profesionales que garantizan su inocuidad, son libres de patógenos y cuentan con evaluaciones nutricionales
Las diferentes variedades son sembradas continuamente en los viveros del Cimmyt para mantener el catálogo de semillas, ya sea para producción o para investigación
Terry Molnar, especialista en maíces nativos del Cimmyt, explica algunas de las características físicas entre las diferentes razas de este cereal
Alberto Chassaigne, especialista en Sistemas de Semillas de Maíz para América Latina, detalla cómo las variedades producidas en el Centro son distribuidas a regiones con diferentes necesidades específicas
El Cimmyt cuenta con un Centro de Recursos Genéticos donde se hace experimentación con las semillas y sus derivados. En él se analiza también el comportamiento de las harinas producidas con estos cereales
Natalia Palacios, jefa del Laboratorio de Calidad y Nutrición y Maíz, describe cuáles son las principales aportaciones nutricionales que tiene el maíz a la dieta del ser humano
En el laboratorio se analiza la capacidad que tiene cada variedad de maíz para fabricar productos que agraden el gusto de la población, por ejemplo, para fabricar tortillas
En el Laboratorio de Química y Calidad de Trigo se realizan mediciones similares, pero con harina de este cereal de origen europeo
Carlos Guzmán, jefe del Laboratorio de Química y Calidad de Trigo, explica cuáles son los usos de las diferentes variedades de trigo, para hacer harinas: panes, galletas, sémolas, etc.
Sylvanus Odjo, especialista en Poscosecha, habló sobre la importancia de tener buenas tecnologías de poscosecha para evitar mermas al productor al momento de conservar los productos
Jelle van Loon, líder de Mecanización de América Latina, hizo una demostración del diseño de maquinaria multifuncional y multicultivo de bajo costo para ayudar a tecnificar a pequeños propietarios de bajo costo
El Cimmyt cuenta con una zona de siembra de unas 60 hectáreas donde se prueban métodos de cultivo denominados agricultura de conservación, con los que han comprobado obtener mejores resultados sin dañar el ambiente
Erick Ortiz, gerente Hub Bajío-Guanajuato, hace una demostración de cómo mantener la tierra sin remover el rastrojo, permite una mejor absorción del agua y evita la erosión del suelo
El productor Francisco Canul Poot (izq.) y Eduardo Tovar (der.), gerente Hub Maíz y Cultivos Asociados Península de Yucatán, hablaron de su experiencia aplicando agricultura de conservación en la región maya de Yucatán
El objetivo del Cimmyt para los próximos años es aprovechar la experiencia generada en los últimos 10 años para llevarla a nuevas regiones del país y que los mismos productores puedan continuar aplicando los conocimientos generados en este centro
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