El gobierno estatal y la Sagarpa implementaron un plan emergente por 152.8 millones de pesos para aminorar los efectos devastadores de las altas temperaturas
Monterrey, NL (México).─ Ante las pérdidas ocasionadas por la sequía en Nuevo León las cuales ascienden a los 384 millones de pesos, situación que ha dañado el patrimonio de alrededor de 14 mil productores agropecuarios, el gobierno estatal y la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), implementaron un plan emergente por 152.8 millones de pesos para aminorar los efectos devastadores de las altas temperaturas que han generado escasez de agua y alimentos.
El gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, y el subsecretario de Agricultura de la Sagarpa, Mariano Ruiz-Funes Macedo, anunciaron también la instalación de un Comité de Atención a la Sequía, que evaluará el impacto de ese fenómeno, así como la debida aplicación de los recursos asignados para combatir la falta de agua y alimentos para ganado en los municipios rurales.
En el palacio de gobierno del estado de Nuevo León, ambos funcionarios advirtieron que las expectativas para los próximos meses dejan ver una situación más grave, por lo que se hace necesario emprender medidas emergentes para mitigar la falta de agua.
El subsecretario de la Sagarpa destacó que el gobierno federal apoyará con 120 mil jornales para beneficiar a dos mil productores de Nuevo León.
El gobernador explicó que del primer paquete emergente de recursos por 152.8 millones de pesos, serán destinados al sector agropecuario 91.8 millones y 61 millones para el sector social.
Como parte de ese plan emergente, el gobierno de Nuevo León dio a conocer también que iniciará un programa de empleo temporal en los municipios afectados por la sequía, en el cual invertirá alrededor de diez millones de pesos.
Alrededor de 39 millones de pesos serán destinados a un proyecto de recuperación del potencial productivo para construir infraestructura adicional como fábrica de alimentos, equipamiento, transporte, pipas, remolques y producción de forraje.
Sin embargo, aproximadamente unos 17.2 millones de pesos se entregarán directamente a los productores agropecuarios para reponer el daño por la muerte de más de ocho mil 143 cabezas de ganado y 42 mil 156 que enfrentan problemas de desnutrición por la falta de agua y alimento.
Se estima que serán beneficiados alrededor de ocho mil 347 productores de 39 municipios de Nuevo León.
De acuerdo con el funcionario federal, adicionalmente se destinarán 20 millones de apoyos directos a productores, mediante programas federales de desastres naturales y 15 millones de pesos por el pago de primas por siniestros meteorológicos.
“Nosotros nos sumamos a las gestiones para la creación de este fondo federal para el desarrollo rural sustentable, que considera una bolsa de diez mil millones de pesos para el 2012 y en donde Nuevo León estaría incluido en esta bolsa para poder hacerle frente a este fenómeno”, expresó el gobernador.
Los recursos de ese programa canalizados para el sector social se utilizarán para un programa intensivo de abasto de agua y suministro de alimentación básica en comunidades rurales.
A escala nacional la sequía ha siniestrado 989 mil hectáreas de superficie agrícola y un millón 750 mil cabezas de ganado, dijo Mariano Ruiz-Funes.
Fuente: ElEconomista.com.mx
