Por la importancia que tiene la producción de granos en México es necesario contar con los elementos adecuados para llevar a buen término el cultivo, por lo que el conocimiento de las técnicas correctas constituye una valiosa herramienta para que el agricultor obtenga un alto nivel de productividad y rendimiento al minimizar los riesgos de una eventual pérdida.
Son numerosos los cuidados que el productor debe tener en cada una de las etapas de la siembra del sorgo, cultivo que ha cobrado gran relevancia en la actualidad, después de que dejó de sembrarse por un periodo de diez años en regiones del norte mexicano, situación que contribuyó a la desaparición de los problemas patológicos por la ausencia de la hospedera.
La roya o chahuixtle, el tizón foliar y el mildiu o punta loca, son las enfermedades que generalmente se presentaban en el pasado, aunque sin ser de importancia económica.
En fecha reciente se ha reportado la presencia de la enfermedad conocida como ergot o cornezuelo, que incita a la producción de alcaloides tóxicos, los cuales limitan el uso del grano con fines de alimentación.
A causa de la detección de brotes iniciales de esta enfermedad se estableció la cuarentena que restringe el uso de semilla de sorgo proveniente de la región de Tamaulipas.
El patógeno que causa esta enfermedad es transportado cuando se pega a la ropa, en la maquinaria, en el cuerpo, en las patas de insectos o simplemente es arrastrado por el viento, por lo que es capaz de recorrer grandes distancias en corto tiempo, desde que aparece por primera vez.
El hongo ataca únicamente ovarios no fecundados, generalmente de los lotes de reproducción de semilla (hembras), y en raras ocasiones en sorgos para grano, cuando hay esterilidad en el polen. El polen se puede esterilizar cuando hay bajas temperaturas (alrededor de 12°C) o altas (cercanas a los 40°C) y sequía durante el periodo anterior a la floración, de dos a tres semanas.
Una finísima capa blanca aparece en la base del ovario, tanto en el interior como en el interior, y finalmente el ovario completo es convertido en una masa blanca y entonces comienza la exudación de miel. Las gotas recién formadas son incoloras y transparentes, pero progresivamente se hacen opacas.
El productor debe analizar detenidamente los síntomas de las plantas para identificar correctamente la presencia del ergot, ya que el hongo no es el único causal de la exudación de mielecilla. Insectos como pulgones también secretan mielecilla pegajosa que frecuentemente se mezcla con los residuos blancos de larvas de otros insectos.
Por ser una enfermedad del ovario, el ergot reduce la cantidad de grano en lotes de producción de semilla, porque las flores no producen grano.
Para prevenir la incidencia de la enfermedad se sugiere usar híbridos debidamente probados, de preferencia los que producen grandes cantidades de polen, y sembrar en las fechas sugeridas.
Se debe destruir e incorporar inmediatamente después de la cosecha los residuos que quedan en el terreno y remover hospederas, antes que llegue la floración.
La mielecilla producida a consecuencia de la infección forma gotas alargadas; el clima seco es un factor que provoca la rápida cristalización de la mielecilla.
Un buen riego en trigo
El trigo es otro cultivo que reviste gran importancia en México, en el que para obtener mejores rendimientos el agua de riego debe manejarse en volumen y distribución óptima y oportuna.
Se requiere aplicar los riegos en amacollamiento, al inicio del espigamiento y en estado acuoso-lechoso del grano, lo cual beneficia el número de hijuelos, espigas, granos por espigas, formación y el peso específico del grano. El número de auxilios dependerá del tipo de suelo y condiciones existentes.
Al aplicar el primer riego de auxilio hasta la etapa final de amacollo se propicia un desarrollo uniforme y estimula el crecimiento de la raíz, mientras que en el último riego debe aplicarse cuando el grano se encuentre entre acuoso y lechoso, ya que después el rendimiento no se incrementa, en cambio, aumenta la posibilidad de acame.
Las siembras en surcos y corrugado presentan algunas ventajas sobre las melgas, ya que requieren 15 por ciento menos lámina de riego y su distribución es más uniforme.
