La producción de alimentos es una de las tareas más importantes de un país porque nos permite hablar de la seguridad alimentaria de su población
Durante 2017 la producción de alimentos agropecuarios y pesqueros ascendió a 286 millones de toneladas, esto representa un crecimiento del 12 por ciento respecto a lo producido en 2012, mientras que la población del país creció en 5.7 por ciento en este periodo de tiempo.
Esto significa que el crecimiento del sector agroalimentario a lo largo de la administración ha ido de la mano con el crecimiento de la población, lo que permite que los mexicanos aseguren la disponibilidad y accesibilidad a alimentos sanos y nutritivos.
Algunos de los logros que permitieron alcanzar esta producción de alimentos agropecuarios y pesqueros son:
El crecimiento de las actividades primarias. Con un crecimiento promedio anual de 3 por ciento de las actividades primarias logramos colocar a México como el undécimo productor de alimentos a escala mundial.
Aumento en la productividad de los trabajadores del campo. La productividad laboral de este sector creció un 12 por ciento a comparación de la observada en 2012, lo que significa mayores producciones y ganancias para los productores.
Gran producción agrícola. En 2017 se alcanzó una producción agrícola de casi 200 millones de toneladas, 12.1 por ciento más que lo producido en 2012.
Incremento de la producción acuícola y pesquera. Esta fue de 2.15 millones de toneladas y superó por un 27.7 por ciento a la producción de 2012.
Protección total a producción ganadera contra riesgos climáticos. Desde 2016, México se ubicó como uno de los pocos países que protegen tanto a los animales como a la infraestructura de la producción pecuaria contra riesgos climatológicos.
Gracias al crecimiento de la producción en el sector primario podemos mantener la seguridad alimentaria de la población mexicana.
