Pertenece a la familia de las leguminosas y se cultiva principalmente en Perú, Ecuador y Centroamérica
Ciudad de México, 3 de enero de 2020.— Rayada, en trozos o en jicaleta son las formas más típicas en las que podemos disfrutar del jugoso y dulce sabor de las jícamas en México.
Este tubérculo de forma ovalada, pertenece a la familia de las leguminosas y se cultiva principalmente en nuestro país, Perú, Ecuador y Centroamérica.
Su vocablo proviene del náhuatl xicamatl y fue introducida a estos lugares por los españoles desde Filipinas, donde se les conoce como singkamas.
Si te encanta la jícama con sal, limón y un poco de chile en polvo, no te pierdas los cinco beneficios que te da al comerla:
- Al estar compuesta en un 90 por ciento por agua, aporta la fibra necesaria que se necesita diariamente, por lo que es perfecta para aquellas personas con problemas de estreñimiento y que buscan bajar de peso.
- Cuenta con inulina, una fructuosa que ayuda absorber el calcio de los alimentos y promueve el crecimiento de bacterias benéficas en el estómago.
- Es una gran fuente de antioxidantes, los cuales borran los radicales libres y ayudan a proteger contra el cáncer, resfriados e infecciones gastrointestinales.
- Protege al sistema inmunológico, gracias a su alto contenido de vitamina C.
- Es un efectivo antidiabético, por su activa potencia hipoglucémica para reducir el nivel de azúcar en la sangre; además combate el colesterol alto y los triglicéridos.
En ceviches, encurtidos o en pico de gallo, recuerda que las jícamas se pueden conservar en lugares secos, de una a cuatro semanas; pero nunca por demasiado tiempo, ya que el almidón se convertirá en azúcar.