Urge un ajuste de al menos 2 pesos por litro en el precio que se paga al productor
Ciudad de México, 7 de mayo de 2021.— Los ganaderos productores de leche están pasando por una fuerte crisis financiera derivada del incremento que se ha tenido principalmente en el costo de la alimentación de su ganado, ya que en lo que va del año el precio del maíz se ha incrementado de un promedio de 4.36 a 7.00 pesos y el de la pasta de soya de 7.35 a 11.20 pesos.
Estos dos insumos representan por lo menos el 40 por ciento del costo de la alimentación de una vaca, a lo que debemos agregar el incremento en los precios de los forrajes como el silo de maíz y la alfalfa en virtud de la sequía que, de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), ya afecta al 84.95 por ciento del territorio mexicano, además del incremento en el costo del diésel.
Vicente Gómez Cobo, presidente de la Federación Mexicana de Lechería (Femeleche), señaló que: “estos incrementos han impactado en el costo de producción en un promedio mínimo de dos pesos por litro de leche, mismos que el ganadero ha tenido que absorber, lo cual ha obligado a la mayoría de los productores a enviar parte de su ganado al rastro para pagar la alimentación del resto”.
Gómez Cobo añadió que “lamentablemente, aunque hemos visto un incremento en los precios al consumidor por parte de la industria, esta no ha realizado ningún ajuste en el precio que paga a los productores, obligando a estos a vender la leche por debajo de su costo de producción”.
Por otro lado, a fin de poder mantener bajo el pago al productor mexicano, la industria ha seguido importando leche en polvo descremada la cual ha tenido un incremento de 95 centavos de dólar la libra a 1.25 dólares, favoreciendo esto únicamente a los importadores de leche y en perjuicio del sector primario.
Para que la situación no agrave la condición del sector en los próximos días, el líder gremial señaló que es indispensable un ajuste de al menos dos pesos por litro de leche para el productor ganadero por parte de la industria, lo cual representaría únicamente el 8 por ciento del precio promedio en el anaquel al consumidor.
Igualmente, es necesario actualizar el precio de garantía que paga Liconsa de 8.20 a 10.20 pesos a fin de mantener este apoyo de forma proporcional al incremento que se ha tenido en los costos de producción.
“La producción de leche es un motor de la economía y mano de obra rural, esta activad es llevada a cabo principalmente por más de 250 mil pequeños y medianos productores de los que dependen más de 1.5 millones de empleos en toda la cadena, por lo que se requiere que esta sea una actividad rentable para que no desaparezca”, enfatizó Gómez Cobo.
