La representación del organismo internacional pidió revisar los programas y marcos normativos del sector agropecuario para beneficiar equitativamente a las comunidades rurales del país y que ello se traduzca en una distribución igualitaria de recursos
Isabel Rodríguez
Ciudad de México.— Ante la amenaza de la falta de alimentos en el mundo, Oxfam México urgió a fortalecer los esquemas de producción agropecuaria de pequeña y mediana escala en el país así como revisar los programas y marcos normativos del sector agropecuario para beneficiar equitativamente a las comunidades rurales del país y que ello se traduzca en una distribución igualitaria de recursos.
“Nuestro país tiene la urgencia de frenar el deterioro en la producción agrícola desde una visión social que integre a comunidades campesinas y aproveche sus capacidades de producción”, apuntó el director ejecutivo de la organización internacional en México, Carlos Zarco.
En su opinión, México tiene la capacidad de revertir las condiciones que han dejando a más de 23 millones de personas en situación de pobreza alimentaria, “considerando que cuenta con una vasta riqueza natural que le permite diversificar sus alimentos y sobre todo, que tiene una amplia estructura social que mantiene una profunda vocación campesina”.
Al respecto, señaló que las transformaciones en la lógica del mercado nacional de alimentos ocurridas durante los últimos 30 años fueron dejando sin oportunidades a miles de pequeños productores rurales, que no pudieron sobrevivir a las presiones de las grandes corporaciones agroindustriales.
Paralelamente, dijo, “se permitió una fuerte dependencia sobre el abasto alimentario desde los mercados externos, lo que ha comprometido la autosuficiencia alimentaria del país, afectando principalmente a los grupos más desprotegidos”, a lo cual se sumó el cambio en los hábitos alimenticios de la población nacional, que ha distorsionado su consumo por falta de poder adquisitivo y por el predominio de alimentos industrializados, apuntó.
Por ello, Oxfam Internacional presentó oficialmente una nueva campaña denominada CRECE, que busca cambiar las políticas globales en materia de producción, comercialización y consumo de alimentos, para que todas las personas dispongan de una alimentación adecuada en cualquier parte del planeta.
De acuerdo con información de Oxfam, esta campaña cuenta con el respaldo de personalidades como el ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva y del arzobispo emérito Desmond Tutu.
Como primera actividad de la campaña CRECE en México, el pasado 1 de junio Oxfam realizó el Foro Virtual Justicia Alimentaria, con el objetivo de reunir a través de internet a los actores mexicanos interesados en aportar ideas y opiniones para abordar la problemática de los alimentos en el mundo desde la perspectiva de nuestro país.
Previamente, el 31 de mayo Oxfam presentó el informe Cultivar un futuro mejor, documento que describe una nueva era de crisis cada vez mayores: escaladas en el precio de los alimentos y del petróleo, eventos climáticos devastadores, derrumbes financieros y contagio global.
Detrás de cada una de ellas, otras crisis siguen ardiendo a fuego lento: el alarmante cambio climático que avanza con sigilo, una desigualdad progresiva, el hambre y la vulnerabilidad crónicas y la erosión de nuestros recursos naturales, apunta el documento.
Asimismo, el informe advierte que el precio de los alimentos básicos como el maíz —que en la actualidad se encuentra en su punto más alto— aumentará más del doble en los próximos 20 años.
Por lo tanto, señaló Oxfam Internacional en un comunicado, el objetivo de CRECE es “poner al descubierto aquellos gobiernos cuyas políticas equivocadas están sosteniendo este sistema alimentario roto y también el poderoso y pequeño grupo, entre 300 y 500 compañías, que se benefician de la situación y hacen presión política para mantener el status quo”.
2000 Agro
