Tecnología

Usando la tecnología para transformar vidas

7 factores de éxito para empoderar a las mujeres rurales a través de las TIC

La revolución digital ha cambiado la forma en que trabajamos, accedemos a la información y nos conectamos entre nosotros. Ofrece oportunidades para aquellos que pueden usar las nuevas tecnologías, pero también presenta nuevos desafíos para aquellos que se quedan atrás.

A menudo denominadas colectivamente como tecnologías de la información y las comunicaciones o TIC, estas tecnologías son cualquier método para compartir o almacenar datos electrónicamente: teléfonos, banda ancha móvil, internet, transmisiones, redes de sensores, almacenamiento de datos y análisis, y más. Las TIC mejoran la vida de los pequeños agricultores de muchas maneras, desde monitorear los cultivos hasta rastrear los precios del mercado y difundir las buenas prácticas hasta facilitar el acceso a los servicios bancarios.

Sin embargo, gran parte de este potencial permanece sin explotar, especialmente en el caso de las mujeres, que desempeñan un papel fundamental en la producción agrícola, pero también enfrentan una triple división: digital, rural y de género. A menudo, tienden a tener menos acceso a las TIC, lo que les deja a ellos y a sus familias en desventaja. Aquí hay siete factores críticos para el éxito al hacer que las TIC estén disponibles y sean accesibles para las comunidades rurales, especialmente las mujeres.

1. Adaptar el contenido para que sea significativo para ellos. Si bien las TIC pueden proporcionar grandes cantidades de información, esto no implica su uso efectivo. La adaptación del contenido a las necesidades locales, idiomas y contextos a menudo sigue siendo un desafío. Por lo tanto, el contenido debe adaptarse a los idiomas locales y volver a empaquetarse para que se adapte a los formatos que satisfacen las diferentes necesidades de información.

2. Crear un ambiente seguro para que ellos compartan y aprendan. El analfabetismo y las habilidades limitadas en el uso de dispositivos complejos para buscar información y temas culturales siguen siendo barreras para recibir y usar la información entregada a través de las TIC. Por ejemplo, los agricultores analfabetos y mayores a menudo tienen habilidades digitales menos desarrolladas y, por lo tanto, en general tienen menos probabilidades de adoptar las TIC.

3. Ser sensible al género. Las desigualdades de género siguen siendo un problema grave en la economía digital, al igual que la brecha entre las poblaciones urbanas y rurales. El acceso y las oportunidades para las mujeres, los jóvenes, los agricultores mayores y las personas que viven en las zonas más remotas se ven obstaculizados por el precio del acceso a las TIC y las desigualdades persistentes.

4. Proporcionarles acceso y herramientas para compartir. Las mujeres rurales tienen menos acceso a las TIC (teléfonos, computadoras portátiles, wifi) porque se enfrentan a normas sociales, porque viven en áreas no conectadas y porque generalmente son pobres. El precio del acceso a las TIC puede ser muy alto en algunos países. El precio de la banda ancha o los servicios móviles es una barrera importante para los grupos más vulnerables, como las mujeres, los jóvenes, los agricultores de mayor edad y las personas que viven en las áreas más remotas. Las políticas de inclusión digital con perspectivas de género deben promoverse para que hombres y mujeres puedan acceder y utilizar las TIC por igual.

5. Construir asociaciones. Las pequeñas empresas privadas locales, las organizaciones locales de productores y las organizaciones no gubernamentales (ONG) comunitarias tienen a menudo el capital social para proporcionar información confiable y servicios de buena calidad. Es más probable que los diversos servicios de asesoramiento y extensión ofrecidos por diferentes tipos de proveedores satisfagan las diversas necesidades de los agricultores, ya que no existe un tipo único de servicio que pueda adaptarse a todas las circunstancias.

6. Proporcionar la combinación correcta de tecnologías. Identificar la combinación correcta de tecnologías que se adapten a las necesidades y contextos locales suele ser un desafío, a pesar de, o debido a, el rápido aumento de la penetración de teléfonos móviles en las áreas rurales. Deben adoptarse enfoques combinados, como una combinación de radio y teléfono, y tecnologías relevantes en el ámbito local seleccionadas sobre la base de un análisis en profundidad de las necesidades locales y los sistemas de información existentes, para aumentar la eficiencia de las iniciativas para las TIC en la agricultura y servir mejor a diferentes usuarios y contextos.

7. Asegurar la sostenibilidad. La brecha digital no solo concierne a la infraestructura tecnológica y la conectividad. Es fundamental que las iniciativas de TIC estén dirigidas tanto a mujeres como a hombres, así como a la unidad familiar más grande y a la comunidad para garantizar la sostenibilidad a largo plazo. Un enfoque inclusivo de las iniciativas de TIC ayudará a generar un reconocimiento generalizado de que es importante que las mujeres puedan utilizar las TIC.

Las TIC ofrecen oportunidades valiosas para el desarrollo agrícola y rural, aumentando el rendimiento sostenible, la eficiencia de las explotaciones agrícolas y agroindustriales y los ingresos para una amplia gama de actores. El acceso de las mujeres a la información y la educación también puede aumentar la aceptación para enviar a hijas e hijos a la escuela, lo que tendrá un mayor impacto y aumentará las posibilidades de reducir la pobreza y lograr un mundo sin hambre.

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