Agroindustria

FAO y PMA advierten probable inseguridad alimentaria en producción agrícola

Es probable que la inseguridad alimentaria empeore en Sri Lanka en un contexto de producción agrícola deficiente, aumentos bruscos de los precios y crisis económica

Ciudad de México, 14 de septiembre de 2022.— La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) advirtieron hoy en un nuevo informe de que se estima que 6.3 millones de personas en Sri Lanka están sufriendo inseguridad alimentaria aguda moderada o grave y se prevé que su situación empeore si no se proporciona ayuda para salvar vidas y apoyo a los medios de vida.

Dos campañas consecutivas de cosechas deficientes dieron lugar a un descenso de cerca del 50 por ciento de la producción, junto con la reducción de las importaciones de cereales alimentarios debido a las limitaciones respecto de la disponibilidad de divisas, según el informe de la Misión conjunta FAO/PMA de evaluación de los cultivos y la seguridad alimentaria.

En el informe se señala que la asistencia alimentaria inmediata y los programas relacionados con los medios de vida, en particular a través de mecanismos de ayuda social existentes, resultan esenciales para que los hogares puedan acceder a alimentos nutritivos, especialmente los que sufren inseguridad alimentaria aguda moderada y grave. Sin asistencia, se prevé que la situación de la seguridad alimentaria se deteriore todavía más, sobre todo durante el periodo de escasez comprendido entre octubre de 2022 y febrero de 2023, impulsada por las cosechas deficientes de alimentos básicos, en particular de arroz con cáscara, y la crisis económica actual.

“A fin de evitar un mayor deterioro de las condiciones de seguridad alimentaria y apoyar la restauración de la producción agrícola, la asistencia relacionada con los medios de vida destinada a los pequeños agricultores debería constituir una prioridad”, declaró el representante de la FAO en Sri Lanka, Vimlendra Sharan. “Con aproximadamente un 30 por ciento de la población que depende de la agricultura, la mejora de la capacidad de producción de los agricultores impulsará en última instancia la resiliencia del sector agrícola, reducirá las necesidades de importación en situaciones de escasez de reservas de divisas y evitará que el hambre aumente.”

“Tras meses aguantando esta crisis económica catastrófica, las familias se están quedando sin opciones, están exhaustas. Más del 60 por ciento de las familias ingieren menor cantidad de alimentos y estos son más baratos y menos nutritivos. Esta situación se produce en un momento en el que las limitaciones financieras han obligado al Gobierno a reducir los programas de nutrición como, por ejemplo, las comidas escolares y los alimentos enriquecidos para madres y niños subalimentados. La principal prioridad del PMA es proporcionar asistencia alimentaria y nutricional inmediata a las comunidades que se encuentran en una situación de mayor riesgo a fin de evitar un ulterior empeoramiento de su nutrición”, afirmó el representante y director del PMA en Sri Lanka, Abdur Rahim Siddiqui.

A petición del Gobierno, la Misión conjunta FAO/PMA de evaluación de los cultivos y la seguridad alimentaria visitó los 25 distritos del país entre junio y julio de 2022 para analizar los niveles de producción agrícola en 2022, especialmente de los principales cereales básicos, así como para evaluar las condiciones de seguridad alimentaria de los hogares.

Descenso significativo de las cosechas

En Sri Lanka, la grave crisis macroeconómica ha causado una escasez aguda de productos esenciales como los alimentos, los insumos agrícolas, el combustible y los medicamentos, y aumentos bruscos de los precios de estos, comprometiendo gravemente la actividad económica y causando importantes perturbaciones en la producción agrícola.

Según el informe, se prevé que la producción de arroz con cáscara, el alimento básico principal, alcance los tres millones de toneladas en 2022, el nivel más bajo desde la cosecha de 2017 que se vio afectada por la sequía, debido principalmente a los bajos rendimientos por la reducida aplicación de fertilizantes.

La producción de maíz, sobre todo del que se usa como pienso, se encuentra aproximadamente un 40 por ciento por debajo del promedio de los últimos cinco años, lo cual repercute negativamente en la producción de aves de corral y ganado. Del mismo modo, la producción de hortalizas, frutas y cultivos orientados a la exportación como, por ejemplo, el té, el caucho y el coco y las especias, se encuentra bastante por debajo de la media, lo cual causa un descenso importante de los ingresos de los hogares y los beneficios derivados de las exportaciones.

Los precios de la mayoría de los productos alimenticios han aumentado de manera constante desde el último trimestre de 2021 y alcanzaron un nuevo récord en agosto de 2022, con la tasa interanual de inflación de los precios de los alimentos en niveles cercanos al 94 por ciento.

Las necesidades totales de importación de cereales en 2022 se estiman en 2.2 millones de toneladas. En el primer semestre de 2022, se importaron más de 930 mil toneladas de cereales, lo cual dio lugar a una necesidad de importación pendiente de 1.27 millones de toneladas. Dada la persistencia de los desafíos macroeconómicos, existe un elevado riesgo de que la necesidad de importación restante no se satisfaga.

Recomendaciones de la Misión

Las principales recomendaciones de la Misión conjunta FAO/PMA son el suministro inmediato de asistencia alimentaria o basada en efectivo a las comunidades vulnerables y marginadas, en particular las mujeres embarazadas y lactantes, los hogares encabezados por mujeres y las personas con discapacidad, a fin de ayudarles a satisfacer sus necesidades inmediatas de alimentación y nutrición. En el informe también se recomienda el suministro inmediato de insumos agrícolas, en particular fertilizantes, sobre todo a los pequeños agricultores. En el informe se subraya la necesidad de ayudar a los hogares a que establezcan huertos familiares y actividades de horticultura doméstica para mejorar su estado nutricional, proporcionando al mismo tiempo cantidades suficientes de combustible para garantizar un cultivo, cosecha, transporte y elaboración eficaces de los cultivos alimentarios.

En el informe se sugiere también que se proporcione a los ganaderos pienso con un elevado contenido de nutrientes, vacunas y lotes de productos veterinarios a precios subvencionados, especialmente a los productores de lácteos y aves de corral, a fin de mitigar las repercusiones de la escasez de piensos. Asimismo, se destacó como prioridad el apoyo a la reanudación y continuación de los programas de nutrición nacionales como, por ejemplo, las comidas escolares, que sufrieron perturbaciones debido a las limitaciones de fondos.

La labor de la FAO en Sri Lanka durante esta crisis

Junto con sus asociados, la FAO está abordando en Sri Lanka las necesidades urgentes relacionadas con la seguridad alimentaria, protegiendo los medios de vida de los agricultores y pescadores vulnerables en los distritos más afectados y promoviendo al mismo tiempo la agricultura urbana.

Para fortalecer la capacidad de producción de los pequeños agricultores, la FAO está proporcionando paquetes de fertilizantes a más de 15 mil pequeños agricultores en cinco de los distritos más pobres del país. El plan para ayudar a otros 116 mil 800 pequeños agricultores con el suministro de fertilizantes se está finalizando. Cerca de siete mil pescadores artesanales de mar en pequeña escala con el mayor nivel de vulnerabilidad han recibido transferencias de efectivo incondicionales para satisfacer sus necesidades alimentarias inmediatas.

Para fortalecer sus medios de vida, ocho mil 700 pequeños productores de soya verde están recibiendo capacitación sobre la mejora del rendimiento y recibirán una transferencia de efectivo única para garantizar la satisfacción de sus necesidades esenciales sin recurrir a estrategias de supervivencia negativas. La FAO también está alentando la agricultura urbana para fortalecer la seguridad alimentaria de la población urbana pobre en Colombo mediante el suministro de lotes agrícolas, paquetes nutricionales y capacitación exhaustiva sobre el establecimiento de huertos domésticos e iniciativas de huertos comunitarios destinados a más de 600 hogares urbanos en situación de pobreza. Asimismo, se están solicitando fondos de donantes para ampliar estas y otras actividades similares.

Labor del PMA en Sri Lanka

El PMA inició su operación de respuesta de emergencia en junio con la distribución de cupones valorados en torno a 40 dólares a mujeres embarazadas en las zonas marginadas de la capital, Colombo, casi la mitad del costo de una dieta nutritiva para una familia de cuatro personas durante un mes. El PMA tiene por objeto llegar a 3.4 millones de personas para final de año, incluidos 1.4 millones de personas mediante efectivo, cupones o alimentos. Esta asistencia específica se centrará en las comunidades más vulnerables y marginadas, sobre todo en las mujeres embarazadas y lactantes, las personas con discapacidad y enfermedades crónicas, los hogares encabezados por mujeres y los hogares de bajos ingresos con más de cuatro miembros registrados en el sistema nacional de protección social (Samurdhi). El PMA también prestará apoyo a un millón de niños en edad escolar inscritos en el programa de alimentación escolar nacional, que ha sufrido perturbaciones debido a las limitaciones de financiación del Gobierno. Asimismo, el PMA ayudará a la continuación del programa Thriposha, que proporciona alimentos enriquecidos a mujeres embarazadas y madres lactantes y a niños subalimentados menores de cinco años.

Fotografía: FAO

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