No obstante, debido a que la superficie habilitada este año fue mucho menor a la de 2008, no se espera una producción abundante, según el campesino de Matamoros, Mario Rodarte
MATAMOROS, TAMPS. (MÉXICO).— La “calienta” del algodonero en algunos ejidos del norte de este municipio está a días de comenzar, según dieron a conocer productores rurales asentados en esa parte de Matamoros.
No obstante, debido a que la superficie habilitada este año fue mucho menor a la de 2008, no se espera una producción abundante, según explicaciones de Mario Rodarte, quien fue abordado sobre este tema en las oficinas de la Confederación Nacional Campesina.
Afirma que “este año el subsidio del gobierno federal a través de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) no fue igual al que se otorgó en el 2008”.
Mencionó que tiene su residencia en la comunidad rural de El Fénix y que el subsidio que se les hacía llegar consistió en lo general en garantizarles un precio con base en la cotización internacional de la fibra.
Sin embargo, debido a la situación de inestabilidad en los mercados financieros mundiales en donde se cotiza la producción agrícola del mundo, en 2009 no se pudo obtener el mismo subsidio.
Otro aspecto que en el caso de Matamoros origina que la cosecha algodonera no alcance los niveles de 2008, es que en la parte sur de este municipio no se siembra debido a que no hay “agua rodada de las presas regionales”.
Por esa razón, sólo en algunos ejidos ubicados al norte de Matamoros se siembra la fibra blanca, como ocurre en Coyote, El Fénix, Buen Abrigo, Los Ángeles, La Luz, La Libertad, 20 de Noviembre, El Pilar, Santana del Pilar, Hormiguero, Escuadrón 201 y otros.
Señaló Mario Rodarte que por esa razón “estamos a menos de una o dos semanas de que dé comienzo la ‘calienta’ del algodonero, la cual pronto se generalizaría y ser convertiría en la recolección general”.
Advirtió que al igual que la producción de los cultivos forrajeros, cuyo precio está deprimido, el algodón no va a generar la misma mano de obra ni muchos menos dejará las utilidades que pudieran esperar algunos campesinos.
En el ámbito local, el Centro de Atención para el Desarrollo Rural (Cader) de la Sagarpa, reveló que en Matamoros se sembraron varios cientos de hectáreas y que en lo general es el ejidatario el que determina cuándo empieza a cosechar su algodón.
Fuente: Milenio.com
