Señala que deben atenderse con prontitud las violaciones a ordenamientos legales
CANCÚN, Q. ROO (MÉXICO).— El secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Francisco Mayorga Castañeda, admitió que las “flagrantes violaciones a ordenamientos legales” de la flota mexicana, que llevaron a la aplicación del embargo camaronero por parte de Estados Unidos, deben atenderse con prontitud para evitar el menor daño posible al sector.
Francisco Mayorga reconoció la aplicación del bloqueo en temporada de veda de la especie, “pero si va más allá de los meses de agosto y septiembre, cuando se reanude la actividad, los daños serían considerables sobre todo para la pesca de altura”.
El funcionario apuntó que ya trabajan en el cumplimiento de los compromisos que asumieron ante la notificación del bloqueo, en materia de capacitación, pues esta semana arrancaron programas dirigidos a cuatro mil 500 pescadores en ocho puertos del Golfo y el Pacífico.
Señaló que hay otro plan a mediano plazo para invertir 270 millones de pesos hasta el fin de la administración de Felipe Calderón, para equipamiento, entrenamiento de personal oficial e incremento de efectivos para inspección y vigilancia.
Entrevistado en el marco del tercer congreso Global Feed & Food —que reúne a especialistas en alimentación humana y animal de varios países del mundo—, apuntó que la afectación al sector camaronero se verá en los términos en que se prolongue el bloqueo.
“Buscamos que el embargo se levante pronto, hacia agosto o septiembre. Ahora estamos en temporada de veda, pero si se prolonga más allá, los daños serán importantes sobre todo para la pesca de altura, porque el bloqueo no afecta a la pesca de granja ni ribereña.”
Apuntó que las acciones también se dirigen a reforzar los mecanismos de inspección, vigilancia y los equipos de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y el Instituto Nacional de Pesca (Inapesca).
Añadió que aumentaron el número de visitas e inspecciones a barcos, en puertos y en altamar, las inspecciones de noche, cuando se intensifica la actividad, y preparan esquemas de financiamiento para que los armadores avituallen los barcos rápidamente en cuanto se levante el embargo.
“Esto también sufrió algunos tropiezos, porque el esquema de financiamiento para los barcos, en parte viene de los compradores de camarón, pero si no pueden comprar camarón, los barcos quedan sin su avituallamiento correspondiente.”
A pregunta expresa, Mayorga Castañeda afirmó que los procedimientos que utilizaron los inspectores y certificadores estadounidenses fueron apegados a derecho y con base en los convenios internacionales.
Dijo que participó en todo momento personal mexicano y “sí encontraron violaciones flagrantes a ordenamientos legales, además de indicios de que se había extendido la práctica de no utilizar correctamente los excluidores de tortugas”.
El embargo por parte de Estados Unidos para el producto tiene sustento —subrayó— y estamos trabajando para corregir.
Insistió en que no habrá pérdida de producción, pues toda la existencia de la temporada anterior está vendida. Acotó que el tema se incluyó en las negociaciones entre los gobiernos, a fin de que se impusiera el embargo en los periodos donde menos daño hiciera al sector.
Por otra parte, al inaugurar el encuentro mundial de alimentación, el titular de Sagarpa señaló que es necesario explorar caminos para que las inversiones pública y privada se enfoquen a la innovación que incremente la productividad del sector, asegure la operación sustentable y disminuya el desperdicio.
Dijo que para el gobierno de México los sectores agropecuario y pesquero son prioritarios, pues se reconocen como los cimientos de la actividad económica al asegurar el abasto a las familias mexicanas de alimentos inocuos y suficientes.
Explicó que el país tiene diversidad agronómica y se producen 878 cultivos diferentes.
Más de 25 productos nacionales se encuentran entre los diez primeros del orbe, destacando el aguacate, papaya, limones y limas, chiles y pimientos, mango, guayaba, azúcar, maíz, carne de caballo, pollo, bovinos y miel.
Dio a conocer que el Producto Interno Bruto (PIB) agroalimentario aumentó en los últimos tres años a tasas de 2.1 por ciento anual, por arriba del crecimiento poblacional. La agroindustria creció a ritmo de 1.4 por ciento, que el funcionario federal consideró sobresaliente en el contexto de la crisis financiera.
Destacó el crecimiento en la producción de conservas de frutas y hortalizas, con 6. 8 por ciento; fabricación de azúcar, chocolate y dulces, con 4.2 por ciento; elaboración de productos lácteos, con 3 por ciento y matanza, empacado y procesamiento de carne de ganado y aves, con 2.4 por ciento.
Fuente: El Financiero online
