El rastro municipal sólo abastece del 25 al 30 por ciento del producto que se requiere
Morelia, Mich. (México).─ Déficit de entre el 70 y el 75 por ciento en el consumo de carne de res enfrentan la capital michoacana y su zona aledaña, debido a que el rastro municipal sólo abastece del 25 al 30 por ciento del producto que requieren las alrededor de mil 300 carnicerías que operan en la región, de las que aproximadamente 650 son formales, aseveró Noé Rangel Aguilar, presidente de la Asociación Ganadera Local de Morelia.
Tras destacar que el Rastro Municipal sacrifica cada semana un promedio de 400 cabezas de ganado para distribuir entre 650 carnicerías registradas como legalmente establecidas, las que demandan en promedio una res por semana, Rangel Aguilar explicó que el déficit se acentúa al recordar que por cada expendio de cárnicos formal existe al menos uno en la informalidad, por lo que la necesidad de producto pasa de 650 cabezas de ganado, con una diferencia del 38.46 por ciento, a mil 300 reses, lo que genera un faltante del 69.23 por ciento.
“Si sólo tomamos en consideración los negocios formales, ya tenemos un déficit de poco menos del 40 por ciento, porque una carnicería consume una media de una res por semana y para las 650 registradas en Morelia y sus zonas aledañas el rastro sólo produce 400 cabezas de ganado.
“Sin embargo, al agregar las carnicerías informales obtenemos un universo de mil 300 expendios con igual número de cabezas de ganado por semana en demanda, lo que incrementa el déficit a casi el 70 por ciento”, detalló Noé Rangel.
El costo de producción de la carne de res en canal, que precisa de una inversión de 15 pesos por kilogramo para obtener de 45 a 72 pesos precio al productor, es uno de los factores que incide en el círculo de desabasto, encarecimiento y volatilidad en los precios que impide solventar la demanda de la región capitalina.
“Hay desabasto porque es caro producir y es caro producir porque no hay suficiente retorno de la inversión, a lo que se suma que la baja densidad poblacional de los hatos ganaderos obliga a los productores a privilegiar esta actividad sobre la obtención de carne, en tanto que la apertura de fronteras con Estados Unidos para la comercialización de ganado vivo a mejores precios impulsa a parte del sector a preferir exportar que abastecer el mercado local”, expuso Rangel Aguilar.
Luego del alza en un 3.33 por ciento en el precio del kilogramo de bistec de res en puntos de venta de la capital michoacana, con lo que transitó de 120 a 124 pesos por kilogramo, Noé Rangel aseguró que este valor permite un beneficio en los bolsillos de los ganaderos que esperarían se prolongase, pero que, por la salud del mercado y la economía de los consumidores, prevén que en breve se estabilizará con el ingreso en los anaqueles de carne procedente de hatos repoblados.
Sin opción para exportar, ganaderos de Morelia y sus alrededores aún no cuentan con fecha estimada para que la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) realice el barrido en los hatos ganaderos de brucelosis y tuberculosis bovinas, lo que frena las oportunidades de exportación con que sí cuentan sus homólogos de Tierra Caliente, refirió Rangel Aguilar.
Pese a que la zona está libre de tuberculosis y brucelosis bovinas, es necesario que la autoridad certifique la sanidad de los animales antes de la expedición de certificados de zonas libres, sin lo cual no existen posibilidades de ingresar a mercados de más alto valor e internacionales.
Fuente: Cambio de Michoacán
