México se ha dado a la tarea de repatriar materiales genéticos de semillas resguardados en otros países
México.─ Como parte de la misión de contar con uno de los mayores bancos de germoplasma del mundo, México se ha dado a la tarea de repatriar materiales genéticos de semillas resguardados en otros países.
Enriqueta Molina, directora del Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), aseguró que a la fecha han regresado al país alrededor de 20 mil muestras de diferentes cultivos.
Estos materiales son clave para el desarrollo de cultivos mejorados, que permitan incrementar la producción de alimentos y, con ello, se alcance la seguridad alimentaria, según expertos.
“Esos materiales fueron recolectados hace muchas décadas por científicos que los resguardaron en sus países porque en México no existía la infraestructura para hacerlo, pero ahora que la tenemos, estamos buscando recuperar todo ese material que es parte de nuestro patrimonio biológico”, explicó Molina.
Detalló que el recuperar dichos materiales permite a los científicos mexicanos realizar investigaciones más profundas sobre la evolución de los cultivos, que a la larga se traduciría en el desarrollo de variedades que puedan adaptarse mejor al cambio climático y dar mejores rendimientos por hectárea.
“Esos materiales son como una fotografía del tiempo y lugar en donde fueron recogidos hace muchos años; en ese tiempo las condiciones han cambiado y, ahora, al compararlo con las plantas actuales, podemos saber más sobre cómo se han adaptado esos cultivos y cómo se puede mejorar esa adaptabilidad”, indicó.
Explicó que la intención de contar con bancos de germoplasma, como el Centro Nacional de Recursos Genéticos (CNRG) de Tepatitlán, Jalisco, donde se guardan estos materiales, permite no sólo hacer investigación para el mejoramiento de variedades, sino contar también con un respaldo de esas semillas en caso de alguna contingencia.
“Los materiales no sólo se resguardan, sino que además los regeneramos para ponerlos a disposición de los mejoradores y puedan ver qué material pueda ser de utilidad para las necesidades del país”, detalló Fernando de la Torre, director del CNRG.
La investigación que se lleva a cabo a partir de este tipo de materiales, explicó, ha contribuido a que actualmente 13 por ciento de la semilla de maíz que se distribuye en México sea producida por empresas mexicanas a partir de muestras resguardadas en este y otros bancos de germoplasma.
“Esta labor tiene un fuerte sentido comercial, pues trabajamos con varias empresas pequeñas productoras de semilla a quienes otorgamos muchas de estas muestras y del trabajo de investigación que realiza la Sagarpa para que ellos las reproduzcan y las pongan a disposición de los productores de diversos cultivos”, señaló De la Torre.
Entre las asecciones (material colectado en un tiempo y lugar específico) que se han repatriado se encuentran muestras de cultivos como maíz, frijol, chile, algodón, calabaza o amaranto.
Además del CNRG, al que también se le conoce como el “Arca de Noé” de México, se suman otros cuatro bancos de germoplasma manejados por la Universidad Autónoma de Guadalajara, la Universidad Antonio Narro y la Universidad Autónoma Chapingo.
Fuente: Agencia Reforma
