ROMA.— Las reservas mundiales de cereales se encuentran a su mínimo histórico y en los primeros meses de 2008 sumarán 420 millones de toneladas, el valor más bajo desde 1983, advirtió este lunes la FAO.
En rueda de prensa, el director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Jacques Diouf, dijo que en los próximos meses las reservas de maíz descenderán a 129 millones de toneladas.
Señaló que en caso de crisis alimentaria esa cantidad podrá garantizar aprovisionamiento sólo para ocho semanas, en vez de las 11 semanas del quinquenio 2000-2005.
Según Diouf, los precios de las materias primas han aumentado de manera vertiginosa y si en 2006 crecieron 9.0 por ciento, en 2007 lo hicieron a un ritmo de 40 por ciento.
Dijo que, por ejemplo, los precios de las harinas han aumentado 22 por ciento en un año y el de las oleaginosas 70 por ciento.
Entre las causas de esa situación se refirió al aumento de la demanda mundial de biocombustibles, a la reducida disponibilidad de países tradicionalmente exportadores, como Australia y Ucrania, y a los efectos del cambio climático.
La FAO, dijo, prevé un aumento de la demanda de biocombustibles, que antes de 2016 crecerá 12 veces, pasando de 15 a 110 millones de toneladas, a lo que se unirá el aumento poblacional, con un promedio de 78.5 millones de nacimientos anuales y a la diversificación de la dieta mundial.
Según Diouf, el conjunto de esos factores causará una disminución de la ayuda alimentaria, un incremento de los costos de transporte (debido al encarecimiento del petróleo) y una subida de 25 por ciento del costo de las importaciones.
Informó que ante ese panorama la FAO pondrá en marcha un programa de 17 millones de dólares para otorgar bonos a los agricultores de países en desarrollo, con los que puedan comprar instrumentos agrícolas, fertilizantes y semillas.
En el plan de acción del organismo también se prevé un sistema de protección social para los sectores más vulnerables.
Notimex
