Por sus extraordinarias propiedades nutritivas, su breve ciclo de cultivo y su capacidad para crecer en ambientes adversos, este producto fue seleccionado por la NASA para alimentar a los astronautas
Ciudad de México.— Desde la antigüedad hasta nuestros días, el amaranto ha sido un producto de alta calidad nutritiva y un aliado de la salud humana. Por su alto contenido nutricional, es recomendable incluirlo en la alimentación del niño, adolescente, adulto y anciano, para mantener un organismo sano.
En la Central de Abasto de la Ciudad de México usted podrá encontrar amaranto natural y con miel en las Naves AB, CD y EF del Sector Abarrotes y Víveres, además de que se comercializa en costales de 10 y 18 kilogramos. También puede comprarse al menudeo, en la Nave I-J.
En 1985, el amaranto fue cultivado en un viaje espacial y después la planta germinó y floreció durante el vuelo orbital de la nave Atlantis. El promotor de este hecho fue el doctor Rodolfo Neri Vela, primer astronauta mexicano.
Por sus extraordinarias propiedades nutritivas, su breve ciclo de cultivo y su capacidad para crecer en ambientes adversos, este producto fue seleccionado por la Administración Nacional de la Aeronáutica y el Espacio (NASA) de Estados Unidos para alimentar a los astronautas.
El amaranto es el producto de origen vegetal más completo y una de las fuentes más importantes de proteínas, minerales y vitaminas naturales: A, C, B1, B2, B3; además de ácido fólico, niacina, calcio, hierro y fósforo.
Es un alimento con elevada presencia de aminoácidos como la lisina, contiene más del doble de proteína que el arroz, casi el 80 por ciento más que el trigo y el triple de aminoácidos que el maíz. Estas características lo hacen un valioso elemento para completar distintas dietas basadas en cereales. Como cualquier semilla, necesita cocerse para consumirlo, pues crudo no es bien digerido.
Puebla es el mayor productor de amaranto en México, le siguen Morelos, Tlaxcala, el Distrito Federal, el Estado de México y Guanajuato.
Fuente: Notimex
