MÉXICO, DF.— Debido a la competencia de refrescos y de agua embotellada, el consumo anual de café en México todavía se encuentra lejos de registrar los dos kilogramos per cápita que se tenían a principios del siglo pasado, expuso la Anacafé.
El presidente de la Asociación Nacional de Industriales del Café (Anacafé), Juan Martínez del Campo Herrero, refirió que mientras en países como Brasil y Estados Unidos el consumo del aromático es de cinco kilogramos por persona al año, en Alemania y Finlandia es de siete y 12 kilos, respectivamente.
Recordó que México es el cuarto productor mundial de café y exporta anualmente 4.5 millones de sacos de 60 kilogramos, sobre todo a Estados Unidos y Europa.
En entrevista, precisó que el consumo interno varía de 1.3 millones a 1.4 millones de sacos, lo que representa 30 por ciento de la producción.
Destacó que “la venta de cafés solubles en el mercado nacional es de 60 a 65 por ciento, debido a que el soluble tiene mayor rendimiento económico y no requiere de cafetera”.
Sin embargo, Martínez del Campo Herrero aclaró que nada tiene que ver el poder de compra con el gusto por el café.
El control de precios impedía a la industria vender su café más caro que el fijado por el gobierno y obligaba a exportar grano de buena calidad, “y el industrial mexicano tenía que utilizar los peores granos”, expresó.
Esa situación, dijo, duró 40 años, “lo que acabó con una cultura del café. Después se presentaron los productos como los refrescos y ahora el agua embotellada, que compiten con el café”.
El presidente de la Anacafé exculpó a los industriales o productores de que en las grandes cafeterías, las de gourmet, se venda una taza del aromático entre 20 y 30 pesos, y recordó que el grano se paga a un precio internacional, por arriba de un dólar el kilogramo.
Si el consumidor busca café en cualquier centro comercial obtendrá un producto de buena calidad y a un precio accesible. “De medio kilo de café (a 100 pesos en promedio) le salen 50 tazas. Es una de las bebidas más baratas contra un refresco o agua embotellada”, aseveró.
El industrial comentó que el café que se ofrece en cadenas se encarece porque elaboran su producto con hasta 90 por ciento de café importado.
Los industriales mexicanos no importan ni un gramo de café que no sea suficiente para abastecer al mercado nacional. “No hay ninguna ocultación de café”, puntualizó.
Anacafé, creada hace 31 años, agrupa a 27 empresas y representa a todos los fabricantes de café soluble, 80 por ciento de productores de café tostado y molido, la totalidad de las plantas descafeinadoras y a 60 por ciento de las exportaciones de café verde. (Con información de Notimex/MCH)
Fuente El Financiero en línea
