Se dejaron de sembrar alrededor de 500 mil hectáreas, principalmente de maíz y frijol
Ciudad Juárez, Chih.─ El saldo de la sequía en el estado de Chihuahua incluye al momento más de 300 mil reses muertas por falta de agua y alimento, además que un millón de vacas tienen menos peso del considerado normal, y más de 200 mil han sido sacrificadas, mediante un programa especial para evitar su muerte por inanición y utilizar su carne para alimentar a indígenas y campesinos, dio a conocer el gobernador César Duarte Jáquez, en gira de trabajo por el municipio de Ojinaga.
Señaló que de igual manera, en el estado más grande de México se dejaron de sembrar alrededor de 500 mil hectáreas por falta de agua, principalmente de maíz y frijol. El mandatario agregó que una de las zonas especialmente afectadas es el norte de la entidad, donde por la carencia de agua y la crisis económica resultado de la sequía, casi la mitad de las tierras agrícolas se quedaron sin producir durante el actual ciclo otoño-invierno en los municipios de Ciudad Juárez, Guadalupe, Distrito Bravo y Praxedis G. Guerrero.
Duarte Jáquez informó que “el año pasado no hubo producción de maíz ni de frijol, pese a que el estado de Chihuahua es líder en la cosecha de estos alimentos, lo cual impacta en mil 300 millones de pesos a la producción agropecuaria en el estado”.
Dijo que “por este tipo de situaciones, más de 300 mil chihuahuenses se vieron orillados a sostenerse con el programa de alimentación del gobierno del estado, el cual hasta el mes de noviembre de este año tendrá un costo de mil millones de pesos”.
Agregó que “la situación del campo es catastrófica en el estado de Chihuahua por la sequía, sin embargo, tenemos muchas esperanzas de que llueva para este 2012”.
A su vez, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) informó en un comunicado que debido a la falta de agua y a la crisis económica generada por la sequía, casi la mitad de las tierras agrícolas se quedaron sin producir durante el ciclo de otoño-invierno en el Valle de Juárez.
De acuerdo con la dependencia federal, esta temporada sólo se sembró trigo y avena en mil 500 hectáreas, cuando durante el mismo periodo del ciclo pasado los cultivos alcanzaron las dos mil 880 hectáreas.
La Sagarpa aseguró de igual manera que los agricultores se encuentran desesperados. No sólo sembraron menos esta temporada, sino que en el ciclo primavera-verano, al menos una tercera parte de los sembradíos de algodón se echó a perder y por eso los productores del campo enfrentan una situación crítica.
En total, los campesinos de la región sembraron durante el ciclo pasado algodón en seis mil 398 hectáreas, casi 23 por ciento más que el mismo periodo de 2010, cuando se cosecharon cinco mil 206 hectáreas.
Sin embargo, los agricultores obtuvieron un rendimiento por debajo de lo esperado; esperaban cosechar seis pacas por hectárea, pero sólo obtuvieron en promedio 4.1 pacas por cada hectárea, según datos de la Sagarpa.
Jesús Armando Reta Mar, jefe del Distrito de Desarrollo Rural del Valle de Juárez —que incluye a los municipios de Juárez, Praxedis y Guadalupe—, afirmó por su parte el domingo pasado que ya empezaron los trabajos en uno de los 19 pozos que se contemplan abrir para aliviar la sequía en la zona, y se adelantarán los apoyos de programas agrícolas como Procampo.
Añadió que la dependencia comenzará la entrega de ese programa y del Programa de Producción Ganadera y Agrícola (Progan, de la Sagarpa), recursos que se otorgarán en la región a partir del 20 de marzo y hasta el 30 de junio, cuando antes se otorgaban entre mayo y agosto.
La contingencia en el agro chihuahuense es resultado de que en siete de los 12 meses trascurridos del año agrícola 2010-2011, las tierras rurales de Juárez y del Valle de Juárez no recibieron precipitaciones pluviales, indicó la Sagarpa.
Fuente: La Jornada en línea
