Productores de varios estados del país suspendieron la entrega de caña a los ingenios para exigir que se publique en el Diario Oficial de la Federación el nuevo precio de referencia del azúcar y que les paguen el adeudo por el suministro de materia prima de la molienda 2006-2007
Durante la zafra pasada el precio que se pagó al productor por kilo de azúcar fue de 3.41 pesos, y sobre esa base se solicita a la Secretaría de Economía y a los industriales un incremento de por lo menos 10 por ciento.
El presidente de la Unión Nacional de Cañeros (UNC), Carlos Blackaller Ayala manifestó que la suspensión del corte de caña paralizó actividades en 225 municipios de 15 entidades.
Dicha decisión se tomó debido a que no hay condiciones, ni voluntad, de los dueños de los ingenios, que han manifestado deseo de disminuir en 12 por ciento el precio de la caña de azúcar que se procesará para la zafra 2007-2008, subrayó.
Según dirigentes de la Confederación Nacional Campesina (CNC) y de la Confederación Nacional de Propietarios Rurales (CNPR), en la zafra 2006-2007 se acordó un aumento de 10.5 por ciento al precio de la tonelada de caña, pero sólo les pagaron 4 por ciento, lo que derivó en un adeudo de más de 6 por ciento.
En un informe dirigido a los ingenios instalados en Chiapas, Blackaller Ayala refirió que la suspensión de labores fue resultado de “la intransigencia y falta de sensibilidad mostrada por los industriales azucareros para fijar el precio de la caña de azúcar”.
“En tanto no se tenga claridad y certidumbre se mantendrá la suspensión de la entrega de la materia prima a los 57 ingenios del país para la elaboración del azúcar”, puntualizó Blackaller Ayala.
La suspensión de entregas afectará la labor productiva-laboral de más de 400 mil personas involucradas en el proceso agroindustrial, que incluye a productores, cortadores de caña, transportistas, personal sindicalizado y empleados de confianza.
Los cañeros señalan que los empresarios y gobierno violaron la Ley de Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar, en dos preceptos claros: uno, no fijaron el precio al kilogramo de azúcar, y lo debieron hacer antes del primero de octubre –como se estipula en el artículo 57 del ordenamiento–; además, no han dado a los productores un porcentaje estipulado de la venta del producto al extranjero.
Fuente: La Jornada
