Sinaloa, del cultivo a cielo abierto a la biotecnología
Señalan que existe una constante migración de la siembra tradicional a invernaderos sofisticados, sin que haya caído el nivel de producción
CULIACÁN, SIN. (MÉXICO).— En forma paulatina los agricultores abandonan los surcos en sus cultivos de legumbres de exportación e incursionan en la biotecnología, con la cual sus plantas germinan en modernos invernaderos y se desarrollan sin el uso de químicos por la ausencia de plagas.
En los fértiles valles del estado, hace una década los horticultores sembraban a cielo abierto hasta 82 mil hectáreas de cultivos como tomate rojo, chile, calabacita, berenjena, pepino, ejotes, entre otros, que les brindaba ocupación temporal a mas de 200 mil jornaleros del campo.
A juicio del presidente de la Comisión de Investigación y Defensa de las Hortalizas, Enrique Habermman Gastelum, en sólo una década, las siembras hortícolas a cielo abierto se han reducido en casi un 50 por ciento, sin que la producción se vea afectada en ese porcentaje.
En la temporada que concluyó, de una superficie cultivada de poco más de 43 mil hectáreas en cielo abierto y dos mil 873, en invernaderos y mallas sombras, se comercializaron al extranjero 717 mil toneladas, con un valor de 725.7 millones de dólares, sin embargo, esta cifra fue 134 millones menor a las captadas en la temporada anterior.
Los sistemas de invernadero, con tecnologías de punta que eliminan el uso de tierra firme para sembrar hortalizas de exportación —ubicados en varios puntos del estado, sobre una superficie de 873 hectáreas— en la actualidad aportan 170 mil toneladas de productos, como tomate rojo, pepino, pimientos y berenjenas, principalmente.
Fuente: El Universal online
Palabras relacionadas: legumbres, biotecnología, invernaderos, plagas, horticultores, hortalizas
Señalan que existe una constante migración de la siembra tradicional a invernaderos sofisticados, sin que haya caído el nivel de producción
CULIACÁN, SIN. (MÉXICO).— En forma paulatina los agricultores abandonan los surcos en sus cultivos de legumbres de exportación e incursionan en la biotecnología, con la cual sus plantas germinan en modernos invernaderos y se desarrollan sin el uso de químicos por la ausencia de plagas.
En los fértiles valles del estado, hace una década los horticultores sembraban a cielo abierto hasta 82 mil hectáreas de cultivos como tomate rojo, chile, calabacita, berenjena, pepino, ejotes, entre otros, que les brindaba ocupación temporal a mas de 200 mil jornaleros del campo.
A juicio del presidente de la Comisión de Investigación y Defensa de las Hortalizas, Enrique Habermman Gastelum, en sólo una década, las siembras hortícolas a cielo abierto se han reducido en casi un 50 por ciento, sin que la producción se vea afectada en ese porcentaje.
En la temporada que concluyó, de una superficie cultivada de poco más de 43 mil hectáreas en cielo abierto y dos mil 873, en invernaderos y mallas sombras, se comercializaron al extranjero 717 mil toneladas, con un valor de 725.7 millones de dólares, sin embargo, esta cifra fue 134 millones menor a las captadas en la temporada anterior.
Los sistemas de invernadero, con tecnologías de punta que eliminan el uso de tierra firme para sembrar hortalizas de exportación —ubicados en varios puntos del estado, sobre una superficie de 873 hectáreas— en la actualidad aportan 170 mil toneladas de productos, como tomate rojo, pepino, pimientos y berenjenas, principalmente.
Fuente: El Universal online
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