Cerca de 1.4 millones de personas han pasado a la situación de inseguridad alimentaria
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) lanzó este miércoles un alerta especial ante la situación de la seguridad alimentaria en Siria, debido al conflicto civil que afecta a ese país desde mediados de marzo del pasado año.
La FAO destacó que según datos de la Oficina Central de Estadísticas de Siria, la inflación se incrementó en cerca de 15 por ciento entre junio y diciembre de 2011, empujada por los fuertes aumentos de los precios alimentarios y la escasez de combustible, que afectan a los costos de transporte.
Apuntó que el Programa Mundial de Alimentos (PMA) calcula que cerca de 1.4 millones de personas han pasado a la situación de inseguridad alimentaria desde el comienzo de los disturbios en determinados lugares conflictivos como Homs, Hama, Damasco, Daraa e Idleb.
Decenas de miles de personas han huido a países vecinos, señaló el mensaje de alerta lanzado a través de la página en internet del Sistema Mundial de Información y Alerta sobre la Agricultura y la Alimentación (SMIA) de la FAO.
El SMIA supervisa la situación alimentaria en el mundo y advierte de forma anticipada sobre las crisis alimentarias que se avecinan.
La FAO dijo que al lado del PMA lleva a cabo actualmente una operación de emergencia, suministrando ayuda alimentaria y bonos a unas 100 mil personas en el país.
Indicó que cada día es más difícil encontrar alimentos, agua y combustible en diversas áreas y la situación afecta también a los criadores de ganado, que tienen una movilidad menor para sus rebaños y un acceso limitado a medicamentos veterinarios y otros suministros.
Señaló que cerca de 300 mil pequeños campesinos y criadores de ganado de las provincias nororientales del país, que han sufrido ya las consecuencias de cuatro temporadas consecutivas de sequía, se ven también afectados por la pérdida de oportunidades para trabajar como jornaleros temporales en otras zonas del país.
“Se calcula que la producción de cereales en Siria cayó casi un 10 por ciento el año pasado debido a las lluvias tardías e irregulares, y la previsión para la cosecha de invierno de 2012 —que comienza en mayo— es aún incierta por los posibles trastornos a las actividades agrícolas y el acceso limitado a los insumos por la situación de inseguridad”, añadió.
Fuente: Reuters
