Frente nacional obligará a candidatos federales a asumir compromisos públicos para el sector, y prepara radicalización de acciones para la segunda mitad de julio
Guadalajara, Jal. (México). — La lucha que durante seis años vienen manteniendo los pequeños productores de leche con el fin de que las industrias y Liconsa les paguen un precio por arriba del costo de producción y de que se frene la masiva importación del producto en polvo y sueros para fórmulas lácteas va ahora por dos frentes de batalla, uno electoral y el otro de movilizaciones callejeras. Las razones son la quiebra de casi cinco mil ganaderos en Jalisco en lo que va del año, y de 20 mil en el ámbito nacional.
“Lo que estamos viviendo los productores de leche es dramático”, pues producir un litro “nos cuesta en promedio cinco o 5.20 pesos, y en promedio lo estamos vendiendo en cuatro pesos. En Jalisco hay situaciones dramáticas donde en muchos lugares se está pagando por debajo de tres pesos”, dijo Álvaro González, presidente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche.
El conteo de las bajas entre los productores sigue avanzando, pues las cinco mil quiebras de este año se suman a los casi diez mil lecheros de Jalisco que dejaron de producir en 2008, de manera que ahora quedan poco más de quince mil en la entidad, según calculó Ladislao Pérez, presidente estatal del frente. En el país se han perdido 150 mil empleos.
Los representantes del frente dijeron que una de las nuevas estrategias es exigir a los gobiernos estatales y federal la resolución de tres demandas, las cuales también serán planteadas a todos los candidatos federales a diputados para que firmen un compromiso público.
Se trata de la aplicación de un precio de garantía “que permita a los ganaderos la subsistencia. Requerimos un precio de cuando menos 5.50 pesos. Esto no significaría subir a los consumidores el precio del litro de leche, dado que la industria tiene márgenes de 30 y 40 por ciento en cada litro que vende”.
“Requerimos que se frenen las importaciones de leche en polvo, hay una total inundación de productos extranjeros donde además las autoridades tienen prácticamente ninguna posibilidad de controlar la calidad de lo que se importa, dicho por la misma Profeco”.
La tercera demanda es que “con urgencia se actúe para que haya normas estrictas que le den garantía a los consumidores de lo que se están tomando”, es decir, aclarar al público si las fórmulas lácteas y productos derivados de la leche que venden las grandes industrias y casi todas las cadenas comerciales, bajo sus marcas propias, son o no leche.
Calcularon que los lecheros producen 30 millones de litros al día, pero la demanda nacional es de 40 o 45 millones, por eso las grandes industrias importan producto, que es más barato. Sin embargo, los productores mexicanos deben tirar cada día cinco millones de litros por falta de comprador o porque los precios que les pagan son ínfimos.
Los lecheros están preparando protestas para la segunda quincena de julio. “No descartamos que vayamos a indagar dónde hay leche en polvo y bloquear y saquear esas bodegas. No vamos a tirar leche sino a regalarla […] todo el mundo quiere salirse a manifestar y yo creo que no vamos a poder evitarlo”, dijo Antonio Salim, secretario general.
González agregó que no se descartan acciones como la toma de fronteras, el cierre de puertos “o inclusive la toma de industrias lácteas que estén trabajando mal”.
Van por marca propia
Para “hacer contrapeso” a las industrias lecheras, el frente nacional de productores de leche está buscando consolidar una “marca nacional de los productores”, cuyo registro se gestiona ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial.
“Estamos avanzando en ver y detectar las plantas pasteurizadoras que ya están obsoletas para poderlas ocupar. Estamos viendo con qué parque vehicular pudiéramos contar” para el proyecto, dijo Antonio Salim. Álvaro González agregó que “estamos haciendo estudios de mercado en algunas ciudades, cuáles son las expectativas de venta, las amas de casas qué prefieren, hemos estado haciendo algunas reuniones con amas de casa”. Esto podría beneficiar a 150 mil productores a escala nacional.
Fuente: Milenio.com
