Granos y Oleaginosas

No todos pierden con la crisis del trigo ruso

En el caso de México, algunos productores nacionales podrían aprovechar la situación para incrementar sus exportaciones

El problema de la restricción de granos a escala global y su aumento de precio, que podría extenderse hacia México, no necesariamente se traduce como algo negativo, ya que algunos productores nacionales podrían aprovechar la situación para incrementar sus exportaciones, consideró Gustavo Merino, director general de Financiera Rural.

Debido a la severa sequía y a los incendios forestales que causaron la pérdida de una quinta parte de las cosechas de trigo, Rusia prohibirá las exportaciones de este grano desde el 15 de agosto hasta el 31 de diciembre de 2010.

Para el funcionario, aún es prematuro evaluar el impacto exacto que tendrá en los precios y en la producción internacional la decisión de Moscú; sin embargo, se considera que los mexicanos que utilizan como insumo el producto tendrán afectaciones en el mediano plazo por el incremento y disponibilidad del grano.

“Dos cosas pueden estar sucediendo, por un lado, habrá productores nacionales que aprovechen para aumentar su producción y su demanda a escala mundial y, por el otro, los que consumen de forma directa o como insumo el trigo y tal vez otros granos verán que se incrementan los precios, aún no podría decir ahorita en cuánto”, aseguró Merino.

El directivo detalló que la institución financiera está en condiciones de apoyar a cualquier productor que requiera financiamiento, ya sea para aumentar su producción o para mitigar cualquier impacto adverso del entorno global en su cadena productiva.

“Aún no definimos ninguna estrategia porque no tenemos del todo claro cómo podría llegar el impacto de esta situación en Europa, pero estamos listos para apoyar cualquier agronegocio o actividad ligada con el campo en México”, dijo Merino.

Para David Beker, director de Economía para América Latina de Bank of America, el actual shock en la oferta de granos no se compara con la crisis alimentaria global de 2007-2008 y, por lo tanto, los efectos sobre la inflación de Latinoamérica, los puntos de equilibrio (breakevens), las tasas y el intercambio de divisas en la región serán mínimos.

“La probabilidad de escasez alimentaria podría ser exagerada por el sensacionalismo mediático. Después de todo, éste es un problema de oferta de un solo producto que comienza a extenderse a los sustitutos”, indicó el analista.

Más crédito y otorgamiento rápido

Para la nueva administración de la Financiera Rural rebasar el crédito otorgado el año pasado, que fue 25 mil millones de pesos, y agilizar los procesos para aprobar un crédito serán unas de las metas por cumplir para este año, asegura Gustavo Merino, director general de la institución.

Entrevistado por El Economista, asegura: “La encomienda que tengo de parte del presidente es aumentar el número de créditos otorgados por parte de la Financiera, de forma responsable, cuidando los recursos y midiendo adecuadamente los riesgos”, asegura Merino.

A partir del 1 de agosto, Gustavo Merino fue nombrado director de Financiera Rural, en sustitución de Enrique de la Madrid Cordero. Merino desempeñaba desde agosto de 2008 el cargo de subsecretario de Prospectiva, Planeación y Evaluación en la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).

Indica que dada la importancia que ha tomado Financiera Rural para los productores agrícolas y para sus comunidades, es imprescindible que las operaciones de crédito se mantengan sanas, para lo cual se establecen criterios de riesgo muy prudentes, tanto para los grandes agroindustriales, como para los pequeños productores.

“En el 2004, Financiera Rural representaba 10 por ciento del crédito total destinado al campo, entre público y privado, y ahora en el 2009 ya representaba 17 por ciento de todo el crédito al sector primario”, detalla Merino.

La cartera vigente de la Financiera al mes de junio de 2010 alcanzó los 13 mil 38 millones de pesos, lo que representa un decremento de 5 por ciento comparado con el mismo periodo del año pasado.

Fuente: ElEconomista.com.mx

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