Se canalizará el lácteo a los desayunos infantiles y escuelas de educación básica
MÉRIDA, YUC. (MÉXICO).— La industria yucateca de la leche fresca se prepara para escribir una nueva etapa, bajo un proyecto denominado “Inversión Cero”, que busca engranar los distintos eslabones de la producción, industrialización y comercialización de la leche, sin necesidad de millonarias inversiones.
En ese sentido, “Inversión Cero” canalizaría la leche fresca a los desayunos infantiles y escuelas de educación básica, aprovechando el plan oficial de retirar la comida chatarra de esos planteles, como propuesta de la Fundación Produce.
El presidente de la Fundación Produce, Pedro Cabrera Quijano, explicó que con el nuevo modelo de sistema silvopastoril intensivo los ganaderos yucatecos se dedicarían exclusivamente a producir leche de alta calidad y bajo costo.
La venta de la totalidad de esa producción, con un precio de garantía, estaría asegurada de antemano a la principal planta local de industrialización, la cual a su vez la canalizaría como leche fresca al mercado local.
En el caso de Yucatán, destacó, el Grupo Bepensa, es la primera planta en comercializar la marca de lácteos Lattia, que se ubica en la hacienda Santa María, de Kancabchén, en el municipio de Baca.
La planta es la primera en la entidad en obtener el distintivo Socialmente Responsable, con capacidad para industrializar unos 30 mil litros de leche al día, pero actualmente sólo trabaja a un tercio de su capacidad instalada que es de siete mil a diez mil litros diarios, precisó.
Y por la bajísima producción local, la empresa tiene que complementar la producción de leche de los ranchos del Grupo Ponce con la compra de materia prima de entidades vecinas, anotó.
El proyecto “Inversión Cero”, abundó, tiene como punto de partida la incursión de Yucatán en el proyecto nacional de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), que impulsa un nuevo modelo silvopastoril intensivo para la ganadería mexicana, con base en una planta yucateca (el uaxim) y un paquete tecnológico diseñado por investigadores de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Yucatán.
Este año, la Sagarpa autorizó una partida especial de 25 millones de pesos para el establecimiento del sistema silvopastoril intensivo en tres mil 200 hectáreas de Michoacán, Jalisco, Guerrero, Chiapas, Oaxaca, Veracruz, Campeche, San Luis Potosí, Tamaulipas y Yucatán.
En 2010, apuntó, se establecerá en 200 hectáreas de suelo yucateco, pero en 2011 ese modelo se extenderá a una superficie mayor.
Cabrera Quijano afirmó que la Fundación Produce tiene el compromiso de convertir ese sistema silvopastoril intensivo en una política de Estado, porque tiene claro que ese modelo representa a la ganadería del futuro.
El sistema silvopastoril intensivo es el uso de tierras que, en el espacio y el tiempo, se asocian con uno o más arbustos y árboles, en una pastura de gramíneas leguminosas y otras herbáceas, que son destinadas a la alimentación de la ganadería. La combinación de los árboles con los pastos tiene efectos importantes en la diversidad biológica, la protección del suelo, el reciclaje de nutrientes y la protección de las fuentes de agua, subrayó.
Indicó que cuando los ganaderos locales incursionen en ese modelo, se reactivarían los centros de acopio que hay en varios municipios del oriente y la empresa Lattia contribuiría con sus pipas de acero inoxidable para recolectar la materia prima y llevarla a su planta industrializadora ubicada en el kilómetro 2.5 de la carretera Baca-Motul.
Aclaró que para la empresa Bepensa no representa competencia porque su mercado es la leche fresca, no la ultra pasteurizada.
Fuente: El Financiero en línea
